Con esta tecnología, el usuario podrá enviar el documento sobre el que esté trabajando, la página web que esté visitando, el vídeo que esté visualizando o la partida que esté jugando a cualquier otro dispositivo, como portátiles, ordenadores de sobremesa o teléfonos móviles.

Para ello, sólo tendrá que pinchar en un botón del escritorio y arrastrar los iconos de los programas que quiera compartir. De forma inmediata esas aplicaciones y documentos estarán disponibles en el resto de dispositivos.

Además, el programa mantiene exactamente los documentos o las páginas como las estaba visualizando el usuario en el dispositivo original. Por ejemplo, mantiene el texto que tuviera seleccionado, la partida en el instante en el que la dejó o el vídeo en el minuto en el que se encontraba.

Frigo Reflections permite también compartir todos estos documentos y aplicaciones con otros usuarios que también tengan el programa instalado o a través de las redes sociales. En este caso, a quien entre en el enlace se le abrirán automáticamente las aplicaciones y documentos tal y como estaban en el momento de ser compartidos.

El programa aún está en desarrollo, pero el objetivo de la compañía es permitir a los desarrolladores hacer compatibles sus aplicaciones con este sistema.