Garralda explicó que el grupo logró elevar un 8,3% su beneficio neto consolidado el pasado año y ganar 289 millones de euros, “a pesar de las dificultades y la incipiente desaceleración económica” por el buen comportamiento de todas las áreas de negocio y, “sobre todo, la bondad de la estrategia de diversificación geográfica y por productos que emprendimos hace ya algunos años”.

En actividad señaló que mientras el resultado asegurador de No Vida, formado básicamente por el negocio tradicional de Mutua en autos, “se mantiene prácticamente estable con el paso de los años”, el consolidado ha crecido “de forma sostenida” desde el 2010 “fruto” del proceso de diversificación emprendido. Ahí es clave la contribución, por ejemplo, de SegurCaixa Adeslas, controlada junto a su socia Caixabank.

En este punto Garralda explicó que, gracias a la aportación que hacen otros negocios distintos al de autos, el grupo puede mantener la política de “contención de precios” y no tener que “maximizar” los beneficios “a costa” de los mutualistas –clientes del seguro de autos-.

El presidente de Mutua se comprometió, de hecho, a volver a congelar las primas a “casi un 50%” de la cartera de autos este año como ya hiciera el pasado ejercicio, dentro de la política de no subir el precio a la mayor parte de sus mutualistas que viene aplicando desde hace años.

De forma extraordinaria este año además acordó el pasado 24 de junio regalar dos meses gratis de la póliza por la paralización forzosa de la actividad de transporte con el confinamiento. Para que los 2,3 millones de pólizas de autos y motos se acojan a esta medida, el único requisito es que los vehículos no hayan sufrido siniestros durante el período comprendido entre el 14 de marzo y el 10 de mayo.

Garralda anunció que hasta hoy mismo se han acogido al beneficio y tendrán 14 meses de aseguramiento en lugar de 12 al renovar la póliza “cerca de un millón de mutualistas”. “Ninguna otra empresa del sector asegurador ha tomado una medida similar para con sus asegurados ni ha llevado a cabo en España una política de contención de precios semejante durante el último lustro”, abundó, reparando en que su ejecución ha tenido además lugar “manteniendo al mismo tiempo los márgenes, la rentabilidad y el nivel de servicio excelente al que les tenemos acostumbrados”.

A pesar de la congelación de las pólizas, la compañía aumentó un 5,8% los ingresos en el negocio de autos, hasta los 1.562 millones de euros, cuando el sector creció un 1,5%. Al tiempo apuntó que lo que permite también mantener la política de precios ajustados en autos es la “importante” contribución de SegurCaixa Adeslas, que el pasado año ganó 386 millones (+10,5%) e ingresó 3.863 millones (+4,2%) y es el ejemplo de la apuesta por la diversificación en negocios.

En la órbita geográfica el principal objetivo en materia también de diversificación incluido en su plan estratégico 2018-2020 era la internacionalización. Aquí recordó que Mutua ha subido del 40 al 60% la participación en la chilena BCI, donde desembarcó en el 2016 y ya proporcionó 17,8 millones de euros en retorno a la inversión el pasado año.

Su segunda operación internacional la formalizó el pasado año con la compra del 45% en la aseguradora colombiana Seguros del Estado. “Tal y como les señalé en la Junta del año pasado, pensamos que cualquier empresa que quiera lograr y asegurarse un desarrollo sostenible en el futuro tiene que mirar fuera de las fronteras de nuestro país”, afirmó Garralda.

Con la vista a futuro avisó de que encaramos una crisis “de enorme magnitud que ha hecho añicos cualquier previsión” que se pudiera tener y “que afectará, en gran medida, a la actividad del sector asegurador y financiero español e internacional durante largo tiempo”.

Sólo en el primer semestre recordó que hemos asistido a una “importante” caída de las matriculaciones y eso, unido a la alta volatilidad de los mercados y los bajos tipos de interés, “hacen que el entorno en el que vamos a desarrollar nuestra actividad empresarial se haya tornado sumamente complicado”.