“Todos tendremos que ceder en algo en nuestras posiciones”, afirmó Sánchez en la rueda de prensa que ofreció junto al primer ministro de Suecia, Stefan Löfven, dentro de su ronda para lograr apoyos a la propuesta española del reparto del fondo.

Desde Harspund, Sánchez insistió en la necesidad de llegar a un acuerdo en julio, y se mostró “siempre abierto” porque “lo importante” para la Unión Europea es “enviar un mensaje claro a los ciudadanos”.

Hay que dar una “respuesta común”, sostuvo Sánchez, por lo que hay que llegar a un acuerdo. No lograrlo es “algo que no nos podemos permitir” e instó a hacer “todos un esfuerzo”. Para ello, resumió, “todos tendremos que hacer renuncias para llegar al acuerdo, que es lo importante”.

Por su parte, el primer ministro sueco, Stefan Löfven, dijo que la reunión con Sánchez había sido muy positiva para conocer los respectivos argumentos y asumió que “evidentemente” la UE requiere “un presupuesto moderno” y “un fondo de recuperación”.

Sin embargo, recordó que la decisión se tiene que adoptar por unanimidad, y matizó que la marcha del Reino Unido ha supuesto la pérdida de un contribuyente neto a las arcas europeas y que el fondo “tendría que ir dirigido a créditos y no a subsidios”; es decir, préstamos a devolver y no transferencias directas como piden España e Italia. “Ahí estriba nuestra diferencia”, constató.