Así lo dijo el ministro en la Comisión de Trabajo, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Congreso de los Diputados. En respuesta a las preguntas de la oposición, el ministro incidió en que España suele tener una tasa de paro estructural en el 14%, un nivel “inaceptable”, y “no es evidente” los motivos que la explican.

A juicio del ministro, “no hay varitas mágicas ni las ha habido en ninguna reforma” y la solución pasa por buscar un consenso con los agentes sociales.

Escrivá puso el ejemplo de las reformas que hizo Alemania en su mercado laboral al inicio de este siglo destacando la “percepción de que ha supuesto un cierto debilitamiento del nivel salarial en colectivos de la población alemana”.

Incidió en que “no hay nada gratis” y “cuando oigo hablar de la reforma laboral me parece que tenemos todos que ser contenidos porque España tiene un problema estructural del mercado de trabajo y de creación de empleo que trasciende a todo tipo de políticas y situaciones”.

Escrivá subrayó que “en este momento de crisis lo importante es centrarnos en cuál es la prioridad”, y en este sentido, indicó la definición de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y de las prestaciones que conlleve “de aquí a final de año”.

El ministro consideró que “tenemos que hacerlo pronto para dar certidumbre a las empresas” y mantener en dicho modelo “cierta flexibilidad”. Así, consideró que se debe trabajar en los incentivos a la activación de trabajadores y en dar “margen a las empresas para adaptarse a las condiciones cambiantes”. “El objetivo es que se active el mayor número de trabajadores y lo antes posible”, concluyó.