Así lo han puesto de manifiesto tres de sus representantes en una sesión telemática organizada por el ‘think tank’ The Family Watch para conmemorar esta jornada, con la que ha pretendido rendir tributo a padres y madres por su contribución a esta institución básica de la sociedad durante las semanas de confinamiento y del estado de alarma por el coronavirus.

La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, abrió el encuentro con una reivindicación de la familia como la “institución nuclear” de la sociedad y señaló que la crisis sanitaria del coronavirus ha puesto de manifiesto que “si hay algo que proteger es la familia”. Desde el Consistorio de la capital de España, hizo un llamamiento al resto de las administraciones para “ser conscientes” de que la familia merece y va a necesitar más apoyos tras el estado de alarma por el coronavirus.

Señaló que la crisis actual del Covid-19 es “la que más ha afectado a las familias” a lo largo de las últimas décadas y no necesariamente en sentido negativo, puesto que ha confinado a todos sus miembros juntos durante meses y les ha forzado a convivir y compartir tiempo de trabajo, de escuela y de ocio sin salir de unas cuantas paredes.

Villacís bromeó con que los padres y madres que han aguantado todo este tiempo tienen “el cielo ganado” por todo lo que han tenido que hacer, pero se felicitó de aspectos positivos como “parar un poco y reflexionar” o reforzar la comunicación con los hijos. “De repente, todo ha desaparecido y nos hemos quedado con lo que hay de puertas adentro de la familia”.

La directora general de Infancia, Familias y Natalidad de la Comunidad de Madrid, Ana Sastre, manifestó que la pandemia por Covid-19 y el confinamiento forzoso durante el estado de alarma han puesto de manifiesto que las familias son más importantes e indispensables que nunca y expresó “dos grandes preocupaciones” al respecto.

Por un lado, señaló la situación económica que deja el coronavirus al hacer que muchas familias se queden sin empleo o con menos recursos. Por otro lado, apuntó a la conciliación que “ha sido clave” durante la pandemia al tener que trabajar al mismo tiempo que se está en casa con toda la familia y los hijos estudian.

Sastre advirtió de que algunas de las medidas que la Comunidad de Madrid se estaba planteando poner en marcha en materia de conciliación ahora “ya no son aplicables” porque las circunstancias han cambiado y anunció la creación de una comisión para evaluar nuevos pasos y encontrar “soluciones distintas” para todos los tipos de familias, especialmente las numerosas y las monoparentales.

DEBATE SOBRE LAS FAMILIAS

A continuación, una mesa redonda moderada por el periodista y director de Información de Servimedia, Pablo A. Iglesias, analizó con cuatro profesionales cómo el confinamiento ha afectado a sus familias y a sus respectivos negocios.

La consultora y profesora de escuelas de negocio Pilar Jericó confesó que el confinamiento le pilló en Málaga porque había ido a visitar a su familia política, y donde tuvo que quedarse por las medidas restrictivas del estado de alarma. Entre otras cosas, este periodo le ha servido para “redescubrir” a su hijo de 3 años y para estar desde la distancia “más cerca” de su madre y de su hermano.

Jericó, que pertenece a “un nuevo modelo de familia” al estar casada con un marido que tiene dos hijos de otro matrimonio, relató que los dos principales “aprendizajes” que extrae de este periodo es que permite “reconocernos a nosotros mismos en momentos difíciles” y que “hay que bajar la autoexigencia”. “Cuando uno lo está pasando mal, hay que relajar porque el nivel de desempeño no puede ser el mismo en los niños y en los padres”, aconsejó desde su faceta de coach de líderes empresariales.

El abogado y presidente de World Jurist Association, Javier Cremadas, coincidió en que el confinamiento ha permitido “mucha reflexión hacia dentro”, lo que ha servido para “fomentar la espiritualidad, la generosidad y la solidaridad con los demás”. Pese al “dolor” que deja la enfermedad con decenas de miles de fallecidos, se quedó como aspecto positivo con la “intensa colaboración público-privada” para levantar hospitales, traer a España material sanitario y frenar los contagios.

Admitió que el Estado ha ido construyendo “un mundo institucional” durante décadas pero subrayó que la sociedad civil también lo ha hecho y sus frutos se han plasmado estos meses, especialmente en las familias, a las que definió como “la primera y la más extendida” de las organizaciones e incluso como “un arma secreta de la sociedad civil”. “Cuando las redes de apoyo se han hecho más débiles, las familias se han hecho mas fuertes para cobijar y cobijarnos”, dijo.

Por su parte, la directora de Asociaciones Territoriales del Instituto de la Empresa Familiar, Inés Rovira, se refirió a las familias como “el puntal absolutamente de todo, que saca a sus miembros adelante cueste lo que cueste”.

Rovira confesó la “angustia” con la que una familia empresaria vive el confinamiento y el parón económico del Covid-19 pero lo expuso con el espíritu del “coche de Fórmula 1 que se va al paddock” a cambiar las ruedas y llenar el depósito de gasolina y afirmó que esto sirve de “puesta a punto” tanto en lo profesional como en lo personal, donde ha sido “difícil de manejar” mantener la distancia con abuelos, tíos y primos.

El cocinero y dos estrellas Michelín Mario Sandoval señaló que el confinamiento le ha servido para “encontrar el silencio, que es una de las cosas más difíciles que tiene el ser humano”. En su caso, además, para estar más cerca de sus dos hermanos, que se dedican a otros ámbitos de la hostelería, y que han colaborado juntos para repartir más de 1.500 comidas a vecinos necesitados del barrio madrileño de Vicálvaro.

Lamentó que el coronavirus deja “muchos damnificados” pero ha servido para ver “quiénes están realmente a tu lado” y para sentir el cariño de la gente que ha comido gracias a ellos. En clave política, pidió a las autoridades “concordia, hacer patria y estar unidos”, en vez de “echar tierra unos a otros” porque el país necesita “salir reconfortado”.

Durante el coloquio, los cuatro expertos coincidieron en la importancia de facilitar la conciliación a la vista de los retos que existen en este ámbito y recalcaron que una de las cosas que se han puesto de manifiesto es que “el teletrabajo ha venido para quedarse” y que también habrá que promover “horarios flexibles en la medida que se pueda” para ayudar a las familias.

MEDIDAS DEL GOBIERNO DE ESPAÑA

Finalmente, la directora general de Diversidad Familiar del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, Patricia Bezurnatea, clausuró este encuentro con un repaso a las medidas aprobadas por el Gobierno de España durante estos meses de pandemia para frenar el impacto que la crisis sanitaria, económica y social ha tenido sobre muchas familias.

Entre otras, destacó la prohibición de cortar el suministro de luz o de agua a personas en situación de vulnerabilidad, el crédito extraordinario de 300 millones para que las comunidades autónomas refuercen los servicios sociales, y otros 25 millones para alimentación de niños y niñas vulnerables por cierre de comedores escolares que ha ayudado a atender a 400.000 menores en todo el país.

También sacó a relucir el Ingreso Mínimo Vital aprobado el viernes por el Consejo de Ministros y que este lunes ha entrado en vigor para servir de “apoyo importante a familias de muy grave vulnerabilidad”, que a partir de ahora contarán con un “colchón importante para que sigan con su vida y función dentro de la sociedad”, pues podrán seguir consumiendo y eso entraña “un factor de movilización de la economía”.

Bezurnatea reivindicó el valor de la institución familiar de “todas las culturas” y señaló que estas semanas de confinamiento han permitido reflexionar sobre las “dificultades” que muchas de ellas tienen para afrontar sus “obligaciones parentales”, a las que en determinados casos “se suman situaciones sociales muy graves”.

Por ello, recomendó emplear el verano “como un espacio muy interesante para ayudar a conciliar en las familias y trabajar aspectos” que han quedado pendientes en estos meses, especialmente en el ámbito escolar. Además, hizo un alegato a favor de las profesiones “de cuidados”, no sólo por los médicos y enfermeros que se han jugado la vida para salvar a muchos contagiados, sino por otras que han sido indispensables durante el estado de alarma y llamó a trabajar juntos por construir “una sociedad más sostenible y emocionalmente más clara”.