Las carteras ‘Smart Allocation’ están dirigidas a clientes asesorados de Banca Privada y Premier que buscan tener exposición a mercados atenuando el efecto de los extremos de los ciclos de valoración en renta variable y se pueden contratar con una inversión inicial de 6.000 euros.

Según detalló el banco, podrán ser contratadas a distancia a través de la operativa “Ready to buy” sin que el cliente tenga que desplazarse a la oficina al igual que el resto de las soluciones de gestión discrecional.

El modelo matemático de las ‘Smart Allocation’ utiliza variables que analizan el ciclo económico, el valor relativo entre los activos y las tendencias a corto plazo en los precios. Si con esa monitorización anticipase la llegada de un periodo bajista, la cartera disminuirá de manera significativa la exposición en renta variable, o la subiría si anticipa revalorizaciones.

Su portfolio incorporará soluciones para tres perfiles: la propuesta ‘Tranquilidad’, con un máximo del 30% en renta variable y con un horizonte a 4 años; ‘Patrimonio’ (máximo de 60% en renta variable, de 4 a 6 años) e ‘Inversión’ (máximo de 100% en renta variable, con un horizonte superior a 6 años).

Caixabank, que cuenta con más de 25.000 millones de euros en gestión discrecional en España, cobra el servicio directamente al cliente pudiendo así conocer por anticipado el coste del mandato de gestión, así como beneficiarse de menores comisiones al acceder a clases “limpias” en los fondos subyacentes. Para estas nuevas carteras, el coste del servicio es de un 0,70% anual.

Por otro lado, el banco ha decidido dar un nuevo impulso a ‘Ocean’, su plataforma online de gestión de fondos, abriéndola a todos sus clientes. Así, pondrá a disposición de todos los clientes fondos de arquitectura abierta para que operen a su iniciativa.

Además, ha incorporado en el catálogo de ‘Ocean’ los fondos de su gestora CaixaBank Asset Management y ha reducido el importe mínimo de aportación en terceras gestoras desde los 20.000 euros a los 600 euros, excepto si el folleto marcase un importe superior, que sería el que se aplicaría.