Lorente condenó enérgicamente los últimos asesinatos de mujeres que han tenido lugar en días precedentes en Villacarrillo (Jaén), Campo de Criptana (Ciudad Real) y Calvià (Mallorca).

Según explicó en un encuentro con periodistas, estos homicidios son producto de una "violencia premeditada y planificada" de los agresores a la que hay que "adelantarse", para lo cual pidió la colaboración de toda la sociedad.

"Tenemos que hacer sentir nuestro apoyo a las víctimas" y "anticiparnos a los agresores". En ese sentido, aseguró que "es preferible tener a un familiar o amigo en la cárcel por ejercer la violencia, pero con posibilidades de recuperarse, que tenerlo en la cárcel por homicidio".

Lorente envió un triple mensaje. En primer lugar pidió a las víctimas que actúen, que no esperen que el agresor cambie y que no se basen en experiencias pasadas para disculpar la violencia.

A los agresores les dijo que son "unos miserables" y unos "cobardes" que "traicionan" una relación que en el comienzo se basó en vínculos de afecto.

Finalmente, a la sociedad en general le pidió más compromiso con la detección y denuncia de casos de violencia en sus primeras fases, porque sólo así se evitarán más muertes.

La sociedad no puede "normalizar" comportamientos que desemboquen en agresiones, porque "si no acabamos con la violencia en su fase inicial" no se podrá acabar con el homicidio de mujeres.