Alimentación

Cepesca garantiza el suministro de productos pesqueros pese a que el 50% de la flota de bajura no faena

- Pide que las tripulaciones que no salen al mar puedan acogerse a ERTE

MADRID
SERVIMEDIA

La confederación Española de la Pesca (Cepesca) garantiza el suministro de productos pesqueros a pesar de los problemas que vive, sobre todo, la flota de bajura, que mantiene el 50% de los barcos inactivos, y de las dificultades que están encontrando en puertos de terceros países las flotas congeladoras.

Según destaca Javier Garat, secretario general de Cepesca, “el sector está haciendo un gran esfuerzo humano y financiero para seguir faenando y suministrar a los ciudadanos una proteína, la del pescado, básica para una dieta saludable y durante el tiempo que sea necesario.

A este respecto, explica que parte de la flota de bajura y la gran mayoría de la flota de Gran Sol y de la congeladora sigue pescando y tienen intención de seguir haciéndolo.

En este sentido, Cepesca destaca que España tiene una flota muy diversa que posibilita mantener la actividad a pesar de las dificultades.

De esta manera, la flota de bajura que continúa pescando sigue suministrando una gran variedad de pescado fresco y las flotas de altura de Gran Sol (aguas de Irlanda, Reino Unido y Francia) y la congeladora, son suministradoras de especies como merluza, gallo y rape frescos, y de bacalao, fletán, marisco, (como gamba, langostino o carabinero), atún, pez espada, tiburón, gallineta, pota o calamar, entre otras, respectivamente.

Estas dos últimas flotas están resolviendo distintas problemáticas en los puertos donde descargan para garantizar la salud de los tripulantes y el suministro de pescado. Así, muchos de ellos, de común acuerdo con los marineros, están manteniendo a las tripulaciones a bordo para evitar contagios.

Por lo que se refiere a la flota congeladora, uno de sus mayores problemas es el relevo de las tripulaciones debido a las dificultades y restricciones de las comunicaciones aéreas, lo que ha llevado a los armadores a solicitar la prolongación del turno actual por unas semanas más. Otro inconveniente es la renovación de las licencias de pesca debido a la falta de inspectores y personal administrativo en países terceros como consecuencia de las restricciones impuestas.

Respecto a la flota de bajura, los problemas para operar se agudizan en el Mediterráneo, Golfo de Cádiz y Cantábrico Noroeste, pero en torno al 50% sigue faenando a pesar de ello.

Las situaciones más complicadas se están produciendo en el Mediterráneo donde, en torno a 2.000 barcos de un total de 7.000 buques, aproximadamente, han parado su actividad. Igualmente, en Galicia, entre 2.000 y 2.500 embarcaciones de un total de 4.200 mantienen su actividad, aunque, por ejemplo, la flota de marisqueo de Rías Baixas ya se ha detenido.

En el caso de la bajura, al hundimiento de los mercados de proximidad, como consecuencia del cierre de los sectores de turismo y restauración, se une la dificultad de cumplir las normas de prevención y de distancias mínimas por las características de los buques de esta flota, además de carecer de medios de protección o material que pueda garantizar la seguridad de los trabajadores.

Todo ello provocó que la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores y Cepesca presentaran, hace ya una semana, una solicitud al Gobierno, para que esta flota pudiera acogerse a la presentación de ERTE, teniendo en cuenta estas circunstancias y también como medida para garantizar el mantenimiento del empleo en el futuro.

(SERVIMEDIA)
27 Mar 2020
JBM/gja