La sección dindical de Fasga Atento denunció "el grave incumplimiento por parte de esta empresa respecto a las medidas necesarias que garanticen la seguridad y salud de los trabajadores".

Señaló que "los trabajadores de esta empresa aún se ven obligados a trabajar en unas condiciones que incumplen claramente con la normativa decretada por el Gobierno para hacer frente a esta crisis", a pesar de las reiteradas reclamaciones trasladadas por la parte sindical desde que comenzó el estado de alarma.

En particular, advirtieron de que los empleados de Atento en León "se ven obligados a desempeñar sus funciones sin guardar la aconsejada distancia de seguridad con el resto de compañeros" y "no se está garantizando una correcta limpieza del material de trabajo y una desinfección exhaustiva del centro".

Por ello, acusó a los dirigentes de la compañía de priorizar "el aspecto económico sobre la seguridad de sus trabajadores", lo que ha llevado a "gran parte" de los empleados a "coger excedencias, sin sueldo, y días de vacaciones, con el consiguiente gran ahorro que supone para la empresa".