En su opinión, ante la imposibilidad de llevar a cabo deportaciones por el cierre de fronteras, la retención de personas en CIEs "es un sinsentido". "Mantenerlos encerrados y expuestos al contagio de coronavirus es un atentado contra su salud y una flagrante violación de los derechos humanos", afirmó.

Por este motivo, internos del CIE de Aluche protagonizaron ayer una protesta al grito de 'iIbertad, Libertad', tras la aparición de síntomas de Covid-19 en algunos internos y por la "insalubridad general" del centro.

Según la ONG, "el Estado español es directamente responsable de la vida y bienestar de los internos en Aluche", y "está incumpliendo" este deber.

Por otro lado, SOS racismo denunció que el Ministerio del Interior ha puesto en libertad a algunos internos sin facilitarles ayuda habitacional y alimentaria, y sin la atención médica adecuada.

Esto les sitúa en una posición "muy vunerable", prosiguió, pues muchos ingresaron en una situación económica ya de por sí precaria, que se vio agravada por la pérdida de su fuente de ingresos habitual. Al salir, denunció que muchos se encuentran en la calle.

Por ello, reclamó que se garantice el acceso al tratamiento médico a todos los internos que presenten síntomas de Covid-19, así como el cierre de los CIE y la búsqueda de alojamientos alternativos para quienes lo necesiten.