Según Fark, "no hay ninguna razón para creer que la tripulación del barco está en riesgo de haber contraído el virus. Poner en cuarentena a los barcos de rescate es como parar a las ambulancias en medio de una emergencia", subrayó.

A su juicio, "cada vez resulta más evidente que se trata de una acción discriminatoria, que solo se aplica a los navíos que realizan salvamento".

A bordo del 'Ocean Viking' hay 32 tripulantes y un periodista, y no existe ningún motivo para sospechar que hayan podido estar en contacto con el virus, declaró Fark. Además, el personal médico de MSF está capacitado y puede aplicar todas las medidas de prevención, incluidas las del Covid-19, siguiendo los protocolos establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Ministerio de Salud italiano.

"Entendemos las preocupaciones relacionadas con el coronavirus", afirmó Fark, "y la tripulación ha respetado todas las medidas preventivas, pero en Libia el conflicto empeora y siguen llegando reportes de embarcaciones en peligro".

De hecho, manifestó su preocupación ante las informaciones llegadas durante los dos últimos días sobre barcas a la deriva y por las personas que en ellas viajan, y reclamó a las autoridades italianas que permitan al 'Ocean Viking' volver al mar para "salvar vidas".