Ingenieros Agrónomos y de Montes crean una comisión para abordar el reto demográfico

MADRID
SERVIMEDIA

El Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros de Agrónomos (CGCOIA) y el Colegio Oficial de Ingenieros de Montes (COIM) han creado una comisión conjunta de trabajo para el Desarrollo Rural y su reto demográfico interior ante la situación de “emergencia social y ambiental”.

La comisión, encabezada por el presidente del CGCOIA, Baldomero Segura y el decano del COIM, Eduardo Rojas, tendrá como objetivo el seguimiento de las decisiones administrativas, legislativas o de planificación que afecten al desarrollo rural y el reto demográfico y trasladar a la sociedad y los responsables políticos las propuestas de ambos Colegios, según informan ambas entidades en un comunicado.

Para ambas ingenierías el reto es importante, ya que consideran que mejorar los recursos forestales y las producciones agrarias es fundamental para mejorar el medio ambiente global, en la lucha contra el cambio climático, y local, en reducción de la contaminación y mejora del paisaje, así como en la biodiversidad, la soberanía alimentaria y la calidad de los alimentos que consumimos.

En una situación que insisten en calificar de “emergencia social y ambiental” ante el abandono de las zonas rurales, ambos Colegios coinciden en recordar la apuesta “decidida y clara” de Europa por frenar esta situación.

Desde ambas instituciones valoran positivamente la continuidad de Luis Planas al frente del Ministerio de Agricultura, y defienden que se siga coordinando desde este departamento las políticas de Desarrollo Rural ante “la incertidumbre” generada en el reciente Real Decreto de estructura del Gobierno en el que “no se mencionan” de “forma agrupada”.

El fraccionamiento en diferentes departamentos, advierten en su escrito, comportaría “conflictos y disfunciones” que afectarían “severamente” a la eficiencia de las políticas para el sostén demográfico de la España interior.

“Los pilares de la política que podrán mitigar y revertir el problema descansan sobre la gestión agraria, la ganadera y la forestal y las correspondientes actividades que rentabilizan sus externalidades”, aseguran.

Abogan también por que las políticas públicas contribuyan a preservar el contexto social y cultural de las zonas rurales. De ahí que recalquen que mantener la esencia rural y su paisaje pasa por “mantener a su vez su actividad agraria, ganadera y forestal”. Es decir, la producción primaria y su gestión, la biodiversidad y el desarrollo rural constituyen un conjunto "indisociable" que requiere de una acción "conjunta, coordinada y suficientemente dotada".

(SERVIMEDIA)
20 Ene 2020
ARS/gja