Solo tres CCAA dispensan a los diabéticos las agujas necesarias para su tratamiento
- Según los enfermeros, que piden con los pacientes a Pajín una norma que garantice la misma atención en toda España
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Canarias, Murcia y la Comunidad Valenciana son las únicas autonomías que proporcionan a los diabéticos las agujas necesarias para seguir su tratamiento con insulina de forma adecuada y no tener, por tanto, que reutilizarlas en varios pinchazos, según pone de manifiesto un estudio realizado por el Consejo General de Enfermería en toda España.
El trabajo, hecho con la información de enfermeros de las 17 CCAA y presentado este miércoles en Madrid, evidencia también diferencias entre autonomías en la dispensación de otros materiales para los diabéticos como lancetas y tiras reactivas para la medición de su glucosa, además de en la existencia o no de protocolos de actuación a este respecto y del procedimiento para el suministro de estos útiles.
A juicio del presidente de los enfermeros, Máximo González, estas diferencias en el tratamiento de los diabéticos no pueden tolerarse porque van contra las recomendaciones internacionales para este tipo de práctica clínica.
Por este motivo, profesionales de la enfermería y diabéticos se han unido para exigir al Ministerio de Sanidad una norma pactada con los pacientes que garantice una atención homogénea en todo el territorio nacional a estos enfermos.
Los enfermeros que trabajan en los centros de salud con los diabéticos cifran en 2,20 de media el número de pinchazos que estos enfermos se suministran al día, lo que supone una media de 66 pinchazos mensuales de insulina.
Sin embargo, tan sólo Canarias (con 78,97 agujas dispensadas al mes), Murcia (72,88) y Valencia (72,87) llegan a cubrir las 66 agujas necesarias. El resto se queda corto en la dispensación obligando a los diabéticos a reutilizar las que tienen, "con los problemas de salud que esto pueda llegar a suponer", denuncian los enfermeros.
Entre los posibles problemas derivados de la reutilización, apuntó González, figuran los riesgos de infección y de dolor, por lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Federación Internacional de Diabetes (FID) desaconsejan esta práctica en una declaración conjunta sobre el tema.
Las comunidades que menos agujas dispensan son Cantabria (17,56), Cataluña (20,87), País Vasco (29,64) y Navarra (47,41).
Mientras González considera que el problema de la falta de agujas y del desigual reparto entre CCAA no es económico, ya que hay centros de salud que suministran este material "a puñados", Ángel Cabrera, presidente de la Federación de Diabéticos Españoles, sostiene que más que en el dinero, el obstáculo está en la "desidia" de las autoridades competentes.
(SERVIMEDIA)
12 Ene 2011
IGA/jrv