En declaraciones a Servimedia, el dirigente de los hosteleros indicó que este fenómeno demuestra que “hace falta mayor información y mentalización” a la ciudadanía y que “además del ordeno, mando y prohíbo, es necesario convencer, porque así se avanza”.

En cuanto al efecto en bares y restaurantes, aseguró que el sector “está cumpliendo la ley, aunque no esté de acuerdo con ella”.

“Se está demostrando que somos ciudadanos responsables”, agregó Guerra, quien destacó que “los fumadores están en la calle colaborando con los hosteleros para que la ley se cumpla”.

A este respecto, señaló que “solo una minoría muy exigua” de clientes está mostrando cierta rebeldía ante la nueva normativa.

Por otro lado, rechazó analizar el presunto impacto económico negativo de la norma en sus primeras horas, ya que es “algo imposible” en un sector con unos 350.000 establecimientos en España.

Según la FEHR, la actividad de los bares y restaurantes podría caer un 10% por culpa de la nueva ley antitabaco. “esperamos equivocarnos en nuestras previsiones, pero eso se sabrá en unas semanas o meses”, concluyó Guerra.