Así figura en los datos provisionales facilitados este lunes por Unespa con las estadísticas que elabora Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA), y que constatan el buen comportamiento del seguro en todas las líneas de negocio en no vida.

Del total facturado, 27.360 millones de euros corresponden a facturación en pólizas de no vida, cuya recaudación creció un 2,9% interanual; y los 20.967 millones restantes son los ingresos generados por la industria en productos de vida.

Dentro del ramo de no vida, Unespa destacó el empuje del negocio en los seguros de salud, cuya facturación repuntó un 4,12% y alcanzó los 6.677 millones.

En los seguros que protegen inmuebles (ya sean viviendas, comercios, industrias o comunidades de vecinos) los ingresos crecieron un 3,64%, hasta los 5.556 millones.

En los llamados “seguros diversos” los ingresos crecieron un 2,96%, hasta los 6.635 millones; mientras que el negocio en automóviles incrementó por su parte la facturación en otro 1,44%, hasta los 8.493 millones, y continúa siendo la actividad que más recaudación aporta en todo el bloque de no vida.

En el negocio de vida Unespa destacó que el ahorro gestionado en dichos productos, medido a través de las provisiones técnicas, alcanzó los 194.589 millones de euros, con un aumento del 3,69% interanual.