Su cesión la efectúa tras rubricar un acuerdo con la Generalitat Valenciana, a través de la vicepresidencia segunda del Consell y Conselleria de Vivienda y Arquitectura Bioclimática de la Generalitat, “con el fin de apoyar a los afectados por el temporal” en aquella región.

Así podrá ayudar a atender necesidades habitacionales de los municipios que más han sufrido las consecuencias de la gota fría, en concreto a familias de Almoradí, Dolores, Callosa de Segura y Orihuela.

La acción responde a su solidaridad con los afectados por el temporal y se encuadra además entre las acciones alineadas con su reciente adhesión a los Principios de Banca Responsable de las Naciones Unidas.