“Ha hecho autocrítica, ha hablado del centro, de la necesidad de sumar para gobernar”, aplaudía uno de los asistentes al salir de la comida con líderes autonómicos del PP que Casado mantuvo en la sede del partido una vez concluyó la reunión del Comité Ejecutivo Nacional.

En esta cita, convocada para apuntalar la estrategia de cara a las elecciones del 10 de noviembre, Casado se marcó como objetivo que el PP “actúe como la gran plaza mayor de la España razonable” porque entiende que hay que “unir para ganar” a la izquierda, recado que hizo llegar a Ciudadanos al advertir de que las consecuencias de la división son “letales” para España.

También subrayó que quiere un PP “reconocible por moderado” en su apuesta por “liderar una mayoría centrada”. Estas palabras, según las fuentes consultadas, fueron muy bien recibidas por los barones territoriales que creen que el PP crece sobre todo en la moderación. Precisamente, en la noche electoral del pasado 28 de abril destacados miembros del PP consultados por Servimedia lamentaban que "el centro se había ido".

Para otro de los asistentes, la mejor frase de Casado en esta jornada fue que “no hay posibilidad alguna de sustituir al PP como cerebro, corazón y pulmón del centroderecha español”, porque las urnas en las pasadas elecciones del 28 de abril ya dieron por “zanjado” este debate a pesar de las pretensiones de Ciudadanos de ocupar el liderazgo de la oposición.

Por ello, aseguran los participantes consultados que la “buena sintonía” reinó en esta comida en la que, entre otras cosas, pudieron degustar tartar de atún y salmorejo mientras exponían al presidente de la formación sus opiniones de cara a esta nueva cita con las urnas.

“Este es el discurso que queríamos todos”, transmitía otro destacado dirigente de la formación, para quien lo importante es “aglutinar a muchísimas sensibilidades” bajo las mismas siglas. Así, los barones del PP ven “acertada” la estrategia marcada por Génova de cara a esta campaña, sin “entrar en refriegas” con posibles aliados y enarbolando la bandera “de la moderación” y de la gestión.

Ante la vehemente negativa de Cs a unirse a ‘España Suma’, hay quien incluso cree que podría darse el escenario de sumar tras las elecciones porque la desmovilización puede jugar en contra de los intereses de la izquierda, ahora también más dividida con la decisión de Más Madrid de concurrir a las urnas.

En lo que coinciden los dirigentes consultados es en que “esta segunda vuelta no puede ser como la primera” y por eso probablemente se introduzca “mucha más calle” en esta nueva campaña electoral. “Mucho más paseo y menos mitin” para “llegar a los no convencidos”, según las citadas fuentes.

A su juicio, los grandes mítines suelen estar repletos de “votantes ya convencidos” y ahora de lo que se trata es de conectar con posibles dubitativos, como aquellos que votaron a Vox para castigar al PP o que no entienden la actual estrategia de Cs.

Todo ello se definirá, según fuentes de la dirección, en las próximas reuniones que tenga el comité de campaña que dirigirá el secretario general del PP, Teodoro García Egea. La novedad en este sentido es que será un órgano “coral” con coordinadores designados por las comunidades autónomas.