A esta cumbre, el presidente español irá acompañado por seis ministros que intercambiarán opiniones con sus homólogos de Economía, Exteriores y Cooperación, Defensa, Interior, Fomento e Industria, Turismo y Comercio.

La XVI Cumbre Italo-Española debía de celebrarse en territorio español pero, según fuentes gubernamentales, Berlusconi pidió a Rodriguez Zapatero que se trasladara hasta La Maddalena (Cerdeña).

Esta localidad estaba preparada para albergar la pasada cumbre del G-8, pero tras el terremoto en L Aquila se celebró en esta localidad como muestra de solidaridad por el desastre que provocó el seísmo, que acabó con la vida de 299 personas.

La anterior cumbre italo-española fue en Nápoles en 2007 ya que en 2008 no se celebró ninguna por motivos de agenda y porque los dos presidentes se encontraron en repetidas reuniones internacionales.

En su encuentro, según fuentes gubernamentales, Rodríguez Zapatero quiere acordar con Berlusconi la posición que se defenderá en la próxima cumbre del G-20, que se celebrará en Pittsburgh (EEUU) a finales de mes, así como preparar los retos europeos a los que España se deberá enfrentar cuando asuma en el primer semestre de 2010 la presidencia de turno de la UE.

En materia de Interior, los ministros ahondarán sobre la problemática de la inmigración y la posición común que debe adoptar la UE. Sobre las últimas medidas en esta materia adoptadas por Berlusconi, el Gobierno español prefirió no hacer comentarios.

Los ministros de Defensa analizarán las misiones en el exterior en las que los dos países participan como son Somalia, Afganistán, Líbano o los Balcanes; mientras los titulares de Exteriores se centrarán, según fuentes gubernamentales, en la situación de la Unión por el Mediterráneo y el interés compartido de acercar la UE a Rusia, así como los países que podrían unirse a la UE.

En la reunión sectorial de economía, España trasladará a Italia sus prioridades económica para la Presidencia española de la UE, la renovación de la estrategia de Lisboa y el desarrollo del Plan europeo de recuperación económica y del Pacto de Estabilidad y Crecimiento en el contexto de la crisis.

Por su parte, los responsables de Industria, que debatirán sobre la política energética y las negociaciones comerciales internacionales, mientras los de Fomento tienen previsto firmar un acuerdo para impulsar las denominadas "autopistas del mar".

En esta XVI Cumbre Italo-Española, que dará el inicio de una apretada agenda internacional para el presidente del Gobierno, se busca "reactivar" el diálogo y "relanzar" las "densas" relaciones bilaterales.