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Investidura

Casado oficializa su ‘no’ a Sánchez “con la conciencia muy tranquila”

- Dice que los portavoces tienen que exhibir “tono firme”, entre otras cosas, para no hacerlo él

MADRID
SERVIMEDIA

El líder nacional del Partido Popular, Pablo Casado, oficializó este martes su negativa a abstenerse ante una posible segunda investidura del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con “la conciencia muy tranquila” y sin que “haya ninguna presión”, sino más bien “comprensión”, hacia esta postura.

Así lo trasladó en rueda de prensa en la sede nacional del PP tras la reunión de la Junta Directiva Nacional –máximo órgano entre congresos− que ratificó los nombramientos de Cayetana Álvarez de Toledo y Javier Maroto como nuevos portavoces parlamentarios del partido en el Congreso de los Diputados y en el Senado.

Casado aseguró que tiene “la conciencia muy tranquila” porque la responsabilidad no es suya, sino del líder socialista. “La abstención no es posible con Pedro Sánchez”, se reafirmó, e incluso llegó a considerar “un debate irreal” que se plantee a su partido ser “la llave” para hacer una “contrarreforma” del anterior Gobierno del PP.

Para el presidente del PP, “la hora de la verdad” ha sido el pacto de Navarra que llevará a la Presidencia del gobierno foral a la socialista María Chivite, previsiblemente con la abstención de EH Bildu, un partido “que todavía no ha condenado la historia criminal de ETA”. “En la hora de la verdad, el PSOE ha elegido” en detrimento de Navarra Suma, sentenció.

A raíz de esta decisión, Casado advirtió al PSOE de que “aquí no tiene ninguna petición que formular” de cara a otra posible investidura a nivel nacional. “El PP no va a permitir que se le haga responsable del bloqueo de aquellos que prefieren pactar con los herederos de Batasuna que dejar gobernar a la coalición que duplicó en votos al PSN”, sentenció.

TRAICIÓN

“Más no podemos hacer. Quien ha tejido un cordón sanitario contra nosotros es el PSOE”, denunció, para a renglón seguido hacer hincapié en que el PP no servirá de excusa para que Sánchez siga pactando con independentistas, “porque eso sería una traición” para su electorado y muchos españoles.

“No sabemos si habrá o no elecciones, si habrá o no otra investidura, pero que nos pille trabajando”, enfatizó en rueda de prensa, tal y como hiciera ante los miembros de la Junta Directiva Nacional del PP. En este contexto, preguntado por la posibilidad de que hubiese una investidura alternativa encabezada por el PP, respondió que de él no depende.

Indicó que habría que preguntar a Sánchez si estaría dispuesto a abstenerse si es él quien encabeza una candidatura que pudiera obtener el respaldo de la formación de Albert Rivera y otros partidos, habida cuenta de que entre PP y Ciudadanos suman 123 escaños, los mismos que cosechó el PSOE el 28-A.

Recordó, no obstante, que Sánchez se hizo célebre por el “no es no” y puso en duda que el tiempo le haya cambiado. Así las cosas, ante la posibilidad de ir de nuevo a las urnas, se abrió de nuevo a “un periodo de reflexión” para articular posibles alianzas con partidos como Ciudadanos. “Si hay elecciones, volveremos a hablar”, prometió.

En este terreno, minusvaloró los datos que arroja el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) y opinó que “la gente se ha dado cuenta de que la fragmentación penaliza” y también de que el PP encarna “el voto del desbloqueo”, como se ha visto en distintas comunidades donde el PP ha dirigido negociaciones con Cs y Vox.

“NUEVO PP”

Ante los cambios en la dirección del PP, con los nombramientos de Álvarez de Toledo y Maroto, y la designación de Ana Beltrán, Antonio González Terol, Pablo Montesinos y Jaime de Olano como vicesecretarios generales, reconoció que “es verdad que es un nuevo PP” porque “los partidos cambian y se regeneran”.

“Pasan los años y hay que incorporar nueva gente”, comentó Casado sobre los nuevos nombramientos en la dirección del partido. Sin embargo, tuvo palabras de “orgullo” para quienes hasta ahora desempeñaron estas funciones, como Marta González (ahora portavoz adjunta en el Congreso), o Vicente Tirado (nombrado vocal del Comité Electoral).

A este respecto, explicó que las Presidencias de Comisión en el Congreso y el Senado recaerán en personas que ocupaban antes “responsabilidades importantes” en el partido y, entre otros, citó a Vicente Tirado, José Antonio Bermúdez de Castro, María Jesús Bonilla, Eloy Suárez, José Antonio Monago, Carlos Floriano, Juan José Imbroda o Fernando Martínez-Maíllo.

Si bien no procede la refundación, admitió Casado, sí se puede hablar de “refundición” y de la renovación de un equipo “por adición”. Ante las dudas que en determinados sectores del PP suscitaba el perfil de Álvarez de Toledo, el presidente de los populares defendió que “Cayetana es la portavoz que todos los partidos desearían tener en un grupo parlamentario”.

TONO FIRME

Alabó su “brillantez dialéctica e ideológica” en un contexto en el que “la comunicación es muy importante” para llegar de forma eficaz a la ciudadanía. “Javier Maroto y Cayetana Álvarez de Toledo son personas a las que siempre se les ha ubicado en un perfil moderado y centrista. No obstante, los portavoces tienen que tener un tono firme, entre otras cosas para que no tenga que tenerlo yo”, subrayó.

Casado incidió en que la centralidad y la moderación no están reñidas con un tono más firme si la situación lo requiere, pues “no es incompatible tener las cosas muy claras y al mismo tiempo decirlas con ímpetu”. “Para mí lo que no es moderado ni centrista es pactar con EH Bildu”, se defendió.

Por último, salió al paso de las críticas a Maroto por empadronarse en la localidad segoviana de Sotosalbos para luego ser designado senador autonómico y ahora portavoz del Grupo Parlamentario Popular: “¡A mí me lo van a decir, que he sido diputado por Ávila dos legislaturas, nacido en Palencia, de padre leonés y madre con raíces cántabras!”, exclamó. Pidió así no comprar “la mercancía averiada de los nacionalistas”.

(SERVIMEDIA)
30 Jul 2019
MFN/man