Este índice mide el cambio en el precio de la mano de obra en el tiempo, sin que dicha medida esté afectada por cambios en la calidad y cantidad de trabajo realizado (por ejemplo, por cambios en la composición de la fuerza de trabajo, en el número de horas trabajadas, en el tipo de contrato, en las características de los asalariados, etc.) o, lo que es lo mismo, descontando el efecto composición.

Por género, los salarios registraron un aumento anual del 0,2% en las mujeres y un descenso del 1% en los hombres.

Las actividades económicas que presentaron los mayores aumentos en el precio del trabajo en 2017 fueron comercio al por mayor y al por menor; reparación de vehículos de motor y motocicletas (1,8%) y hostelería (1,5%). Por el contrario, los mayores descensos se dieron en el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (–4%) y Administración Pública y defensa; Seguridad Social obligatoria y en Industrias extractivas (–3% ambas).

La ocupación es una de las variables que más influye en el precio de la mano de obra. En 2017 los mayores aumentos de los salarios se dieron en los grupos de directores y gerentes (1,1%) y de trabajadores de los servicios de restauración, personales, protección y vendedores; ocupaciones militares (0,6%). Por el contrario, técnicos y profesionales científicos e intelectuales y técnicos; profesionales de apoyo presentaron los mayores descensos (con un –2,5% y un –0,5%, respectivamente).

En cuanto al tipo de contrato, el índice de precios del trabajo refleja una caída anual del 1,2% en los temporales y del 0,4% en los indefinidos.

Respecto al tamaño del centro de trabajo, los salarios presentaron el mayor descenso en los centros de 200 o más trabajadores (–1%). Por el contrario, aumentaron un 0,1% en los de 1 a 49.

Por antigüedad en el centro de trabajo, el mayor descenso del precio del trabajo se registró en los puestos de trabajo ocupados por trabajadores con antigüedad de entre uno y tres años (–1,3%). Por su parte, los trabajadores con antigüedad de 4 a 10 años presentaron el mayor aumento anual (0,1%).

Atendiendo al grupo de edad, el mayor aumento del precio del trabajo se registró en 2017 entre los menores de 25 años (3,3%) y el mayor descenso en los trabajadores de entre 45 y 54 años (–1,1%).

Si se mide por nacionalidad, los salarios cayeron un 0,5% para los trabajadores españoles y un 0,7% para los extranjeros.

Por comunidades autónomas, los mayores incrementos salariales se dieron en Cantabria (1,1%), Galicia (0,8%) y Asturias (0,6%). Por su parte, los mayores descensos se observaron en La Rioja (–1,6%), Castilla-La Mancha (–1,5%) e Islas Baleares (–1,4%).