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El Santander elige a Lee Hecht Harrison para recolocar a los empleados afectados por su ERE

- El banco prevé completar la salida de 3.713 empleados antes de fin de año

MADRID
SERVIMEDIA

El Santander cuenta con la consultora Lee Hecht Harrison para recolocar a las personas afectadas por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que negocia con los sindicatos y con el que prevé suprimir 3.713 puestos de trabajo.

Así se lo ha trasladado la dirección del banco a los sindicatos este jueves con el compromiso de buscar un empleo a todos los que se acojan al ERE y demanden el servicio. A tal fin esta garantía no tiene límite de tiempo y Lee Hecht Harrison contará con la colaboración de Adecco para favorecer la capilaridad a través de sus agencias.

La ley obliga a las empresas que llevan a cabo un despido colectivo que afecte a más de 50 trabajadores a ofrecer un plan de recolocación externa a través de empresas autorizadas que, además de buscarles trabajo les ayude en esa carrera con medidas de formación y orientación profesional, explican fuentes sindicales.

Con la reunión se daba inicio al periodo formal de consultas para negociar las condiciones de un ERE donde prevé prescindir del 11,4% de su plantilla en España y echar el cierre al 26% de las sucursales (1.150 oficinas) para adaptar la capilaridad tras la fusión del Popular.

El encuentro ha servido para dar carácter formal a la comisión negociadora y el banco ha hecho entrega del informe que justifica las causas organizativas y productivas del ajuste que proyecta. Ahora corresponderá a los sindicatos elaborar su contrainforme, una vez analizada la información y la documentación presentada, tal y como estipula el Estatuto de los Trabajadores.

El Santander priorizará la adscripción voluntaria, pero si no alcanzase las salidas previstas decidirá el resto de bajas en función de la menor polivalencia funcional del trabajador y su valoración por desempeño.

El plazo indicado para las medidas extintivas es hasta el 31 de diciembre de este ejercicio, aunque en casos especiales la desvinculación podrá extenderse hasta marzo de 2020.

CCOO y UGT indicaron que el principal objetivo es “reducir de manera importante” la cifra de puestos de trabajo a “destruir” y trabajar para mejorar las condiciones de salida.

“La voluntariedad y la renuncia a medidas traumáticas solo será posible si la oferta realizada es lo suficientemente atractiva, como ya se demostró en el expediente de servicios centrales”, indicó CCOO en un comunicado donde repara que “no se entendería” que “fuera generoso” con los niveles más altos de la plantilla –los que estaban en servicios centrales- y “fuera cicatero” ahora.

En UGT indicaron preocupación por el futuro de la plantilla y porque el proceso “no se eternice como la única media que el banco encuentra a su alcance para optimizar sus beneficios”.

(SERVIMEDIA)
23 Mayo 2019
ECR/caa