"Es particularmente preocupante que las escuelas y los hospitales sean dañados y destruidos en los bombardeos. Cualquier ofensiva militar en regiones densamente pobladas como Idlib y Hama provocará necesariamente la muerte de niños inocentes", declaró el director de Respuesta de la ONG en Siria, Marc-Andre Hensel.

Casi medio millón de personas están expuestas a la violencia en áreas de riesgo dentro de Siria, y más de 250.000 personas han huido de sus hogares desde principios de febrero, con un estimado de 150.000 desplazados sólo en la última semana, según World Vision.

"Estamos muy preocupados por la reciente escalada de violencia y estamos trabajando con nuestros socios locales para apoyar la respuesta de emergencia. Se estima que decenas de miles de civiles, incluidos niños, se encuentran en las áreas de primera línea. Para los niños, esta es una situación aterradora", destacaron desde la organización.

La ofensiva militar lanzada el 3 de mayo aumentó los ataques aéreos intensivos y bombardeos de artillería, y ya ha desplazado a un cuarto de millón de personas y amenaza con desplazar a cientos de miles más.