La entidad ha dejado atrás la travesía de los últimos trimestres por el sobreesfuerzo efectuado, con cargos a las cuentas, para sacarse de encima del ladrillo y los millonarios costes originados por los problemas de migración de su plataforma en el británico TSB.

Con las cuentas ya normalizadas y un TSB en beneficios, su cotización escaló hasta los 1,1035 euros. A ese precio su capitalización bursátil alcanza los 5.702,93 millones de euros. En una sola sesión ha engordado su valor en 230,14 millones, frente a los 5.472,78 millones que le reconocía el parqué en cotización la víspera.

El consejero delegado del grupo Sabadell, Jaime Guardiola, indicó durante la presentación de resultados que alcanzará este año el 7% de rentabilidad medido sobre recursos propios (ROE) y elevará el capital más exigente al 11,6% CET1 fully loaded.

Con ambos ratios se infiere que la meta en resultados para el ejercicio rondará los 900-950 millones de euros para el ejercicio completo, donde TSB tendrá una aportación aún "neutral" pero fijará las bases para su posterior crecimiento.

El ejecutivo defendió que la entidad se siente "confortable" con su actual hucha de capital, el ratio que con más atención seguían los expertos, por lo que no prevé enajenar negocios o filiales para reforzar el balance. Entre ellos incluye el británico TSB, donde descartó una venta y aseguró que deberá ser capaz de construir en el futuro el 20% del beneficio del grupo.