De la cuantía total, el 55,57% o 9.906 millones correspondieron al ramo de no vida y los 7.920 millones restantes (44,43%) al de vida, según los datos provisionales recabados por Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA) para Unespa.

El ramo específico de no vida elevó un 2,88% la facturación, apoyado en un avance de todas las líneas de negocio.

Una de las mayores progresiones la contabilizó el ramo de salud, con un avance del 3,67%, hasta los 2.313 millones, mientras la línea de negocio multirriesgos creció un 3,55% y ascendió a 1.980 millones. En esta última rúbrica se incluyen las pólizas de hogar, comunidades de vecinos, comercios e industrias.

Por su parte, la facturación en seguros de automóviles subió un 1,93 %, hasta los 2.975 millones, lo que continúa siendo la mayor contribución a los ingresos del ramo de no vida.

El resto de pólizas englobadas bajo la categoría “resto no vida” incrementó a su vez la recaudación por primas en un 2,78%, hasta los 2.637 millones.

En vida, el ahorro gestionado mediante seguros, medido a través de las provisiones técnicas, alcanzó los 191.929 millones de euros, cuantía que supone un incremento interanual del 3,80%.