Según la última predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el viernes, día 3, todavía predominará una situación anticiclónica y un tiempo estable en gran parte del país.

Así, ese día sólo se esperan precipitaciones débiles o localmente moderadas en el extremo norte, de nieve a partir de los 200-300 metros; en Baleares, donde podrán ir acompañadas de tormenta y granizo, con la cota de nieve a unos 700 metros, y en las islas occidentales de Canarias.

En el resto del país predominarán los cielos poco nubosos o despejados, aunque las heladas serán generalizadas en el interior, y probablemente fuertes en zonas altas de la mitad norte.

El sábado, día 4, una profunda borrasca atlántica se aproximará al oeste peninsular, provocando un aumento de la nubosidad en la mitad oeste y precipitaciones débiles a moderadas en el tercio más occidental a últimas horas.

En el área mediterránea predominarán los cielos poco nubosos o despejados, y en Canarias habrá lluvias débiles a moderadas, que serán más probables en las islas occidentales. Las heladas volverán a ser generalizadas en el interior peninsular el sábado.

EL DOMINGO, MÁS AGUA

A partir del domingo, día 5, sucesivas bandas de precipitación asociadas a esta borrasca se desplazarán de oeste a este por la Península y Canarias, dando lugar a precipitaciones generalizadas, más frecuentes e intensas en la vertiente atlántica y más débiles y ocasionales en el área mediterránea.

Meteorología apunta la posibilidad de que sean fuertes y persistentes en el oeste y suroeste de Galicia, en Andalucía occidental, área del Estrecho y mitad occidental del Sistema Central.

En cuanto a las temperaturas, se espera un ascenso notable el domingo y lunes, aunque el martes y el miércoles tenderán a bajar de nuevo, con heladas en zonas de montaña.

La cota de nieve se situará esos días en torno a los 700-900 metros en el noroeste peninsular a primeras horas del domingo, y subirá a cotas altas los días siguientes.

En cuanto al viento, será moderado a fuerte en la mitad oeste y en Canarias, con rachas muy fuertes en el litoral gallego.