Juicio Procés

Trapero asegura que “estaba incómodo” por la deriva política del `procés´, igual que Jordi Jané

- Achaca un “punto de irresponsabilidad” en la actuación de Forn

MADRID
SERVIMEDIA

El mayor de los Mossos d´Esquadra durante el 1-O, Josep Lluís Trapero, aseguró este jueves en su declaración como testigo en el juicio del 1-O que “estaba incómodo” por la deriva política que había tomado el Govern de la Generalitat y que motivó la salida del Ejecutivo del conseller de Interior Jordi Jané el 14 julio de 2017.

Preguntado por el fiscal Javier Zaragoza sobre el relevo de Jané en el Govern, Trapero aseguró en relación a sus motivos: "Yo pienso que por la deriva política y llegó un momento en el que no quería correr riesgo y que estaba incómodo. Estábamos incómodos los dos, llevábamos tiempo hablando y no quería correr ningún tipo de riesgo".

La Fiscalía preguntó a Trapero pese a que no lo propuso como testigo. Esta testifical fue propuesta por Vox y por las defensas de Jordi Sánchez, Jordi Cuixart y Joaquím Forn, pero el presidente de la sala, Manuel Marchena, decidió que fuera la acusación la que interrogara primero y que fueran las defensas las últimas en ser oídas.

Trapero también se pronunció sobre el relevo del director general de Policía Albert Batllé, que atribuyó a unas "declaraciones" del exconsejero Joaquim Forn en las que no quiso confirmar su continuidad y tras las cuales Batllé presentó su dimisión.

El fiscal Zaragoza interrogó a Trapero sobre las declaraciones que hizo Forn asegurando que los Mossos garantizarían el voto en una jornada normal de referéndum. El exmayor dijo que esas palabras "encajaban muy mal" dentro de la policía autonómica y, de hecho, "hubo un momento en que hicimos un comunicado para decir que no estábamos de acuerdo con lo que decía el señor Forn".

Según su relato, "el señor Forn sabía que su acción política iba por un lado y la actuación de los Mossos siempre fue la de cumplir con la ley. El señor Forn es un político”, dijo, y añadió que “había un punto de irresponsabilidad" en su actuación.

Trapero también tuvo que dar explicaciones en sede judicial sobre por qué informó a Forn de las instrucciones y órdenes de la Fiscalía pese a que ello suponía vulnerar el secreto de las actuaciones que había dictado el ministerio público. "Yo trabajo desde la confianza de que el cargo político va a guardar el secreto de las actuaciones de la Fiscalía", se justificó en uno de los momentos de mayores aprietos para el jefe de los Mossos. Argumentó, además, que estaban “en un contexto en el que las órdenes (de Fiscalía) se publicaban en la prensa y salían”.

Sobre el operativo para evitar el 1-O ordenado por la jueza, Trapero dijo que “la Guardia Civil presentó un borrador con información escasa y la Policía Nacional no presentó nada. Y nosotros presentamos un plan de actuación. A partir de las sugerencias de modificación que nos plantearon, la voluntad era la de cambiar y hacer lo que nos ordenaban, pero el escenario fue cambiando".

Insistió, además, en que en las reuniones del 21 y 23 de septiembre se limitó a defender a los Mossos, aunque admitió que “quizá” no lo hizo “de un modo apropiado ni con las palabras correctas, porque no estaba de acuerdo en que los Mossos estuvieran bajo el control de Pérez De los Cobos”.

(SERVIMEDIA)
14 Mar 2019
SGR/ICG/caa