Así se desprende de los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) sobre el año hidrológico, que tiene en cuenta las lluvias caídas entre el 1 de octubre de un año y el 30 de septiembre del siguiente, y no coincide con un año natural porque parte de las precipitaciones del otoño y del invierno pueden acumularse en forma de nieve y no fundirse hasta la siguiente primavera.

A partir de esos datos, recogidos por Servimedia, se deduce que entre el 1 de enero y el 26 de febrero de este año se han acumulado 70 litros por metro cuadrado de precipitaciones en el conjunto de España, frente a los 111 litros del promedio entre 1981 y 2010, que se tiene en cuenta como periodo de referencia. Ello significa que este año está siendo un 37% menos lluvioso de lo normal.

Esto contrasta con el hecho de que 2018 fue muy húmedo en España, con una precipitación media de 808 litros por metro cuadrado, lo que supone un 25% por encima de la media entre 1981 y 2010 debido a una primavera extremadamente húmeda por el paso continuo de borrascas atlánticas.

De hecho, el año pasado fue el quinto más húmedo desde que la serie histórica de la Aemet comenzara en 1965 y el segundo de este siglo XXI, sólo por detrás de 2010 (869 litros por metro cuadrado).

Por el contrario, 2017 resultó ser el segundo año más seco del registro histórico, con 474 litros por metro cuadrado, una cifra sólo superior a la de 2005 (468).

En cuanto al año hidrológico iniciado el pasado 1 de octubre, la Aemet apunta que las precipitaciones se encuentran por debajo de sus valores normales en casi toda la mitad oeste peninsular, la provincia de Soria y la mitad oriental de Castilla-La Mancha, el norte de Huesca y Zaragoza, la provincia de Alicante y la mitad norte de Murcia, y Canarias salvo en el noreste de Gran Canaria y Fuerteventura.

Por otra parte, las precipitaciones se sitúan por encima de sus valores normales en la franja norte que va desde el Asturias hasta Navarra y la mitad norte de La Rioja, alrededor de la sierra de Grazalema (Cádiz), gran parte del cuadrante nororiental peninsular, las islas de Mallorca y Menorca, y en el noreste de las islas de Gran Canaria y Fuerteventura. Desde el pasado octubre ha llovido el doble de lo normnal en zonas de Castellón y del litoral de Almería.

RÉCORDS DE CALOR

Por otro lado, febrero se despide este jueves con sol y calor después de que el tiempo primaveral haya traído en los últimos días récords históricos de temperaturas máximas nunca registradas este mes en 14 ciudades del norte de la península, alguno de ellos con valores inéditos desde 1920.

Las efemérides por calor se registraron en A Coruña, Bilbao, Calamocha (Teruel), Huesca, Logroño, Lugo, Ourense, Pamplona, Pontevedra, San Sebastián, Soria, Tortosa (Tarragona), Vitoria y Zaragoza.

Según los datos de la red de estaciones de la Aemet, recogidos por Servimedia, esas efemérides comenzaron a producirse este fin de semana y continuaron hasta este miércoles.

Precisamente este miércoles se batió el récord de calor más antiguo en febrero. Ocurrió en Tortosa (Tarragona), que llegó a 27,2ºC, lo que supone 0,9 más que la anterior temperatura máxima más alta, registrada el 23 de febrero de 1967. Se trata del día de febrero más caluroso en ese municipio desde 1920, año en que comienza la serie histórica del observatorio de esa localidad.

Los primeros récords de calor llegaron el sábado, concretamente en Soria, que, con 21,8 grados, vivió el día más caluroso desde 1944, año en que empieza el registro histórica en ese lugar. La anterior efeméride se remonta al 15 de febrero de 1998, con 21,2 grados.

El otro récord del sábado se produjo en Zaragoza, donde la temperatura máxima alcanzó los 23,1 grados, un valor que nunca se había registrado desde 1951 y que supera los 22,5 grados medidos el 18 de febrero de 1978.

El domingo también fue un día históricamente caluroso porque Ourense tuvo 25,0 grados de temperatura máxima, nuevo récord desde 1973 y dos décimas más alta que la registrada el 25 de febrero de 2000.

ESTA SEMANA

Por otro lado, esta semana comenzó con una tónica similar de nuevas efemérides, con dos récords de temperatura máxima establecidos este lunes: 23,9ºC en el Aeropuerto de A Coruña (frente a 23,4 del 22 de febrero de 1990, que era la más alta desde 1972), y 25,5 en Ourense (0,5 más que el domingo).

Este martes se registraron tres nuevos récords, concretamente 24,3ºC en el Aeropuerto de A Coruña (0,4 más que el lunes); 23,5 en Pontevedra (frente a 23,4 del 27 de febrero de 1997, con datos desde 1986), y 24,0 en el Aeropuerto de Lugo (23,8 el 23 de febrero de 1998, con la serie histórica iniciada en 1986).

Y este miércoles se convirtió en el día históricamente más caluroso de este mes porque nueve estaciones de la Aemet marcaron récords nunca medidos en febrero y las temperaturas fueron más elevadas que en los días precedentes: 25,6ºC en San Sebastián (temperatura más alta desde 1928); 26,9 en el Aeropuerto de Bilbao (1948); 22,6 en el observatorio vitoriano de Foronda-Txokiza (1975); 23,1 en el Aeropuerto de Logroño (1949); 22,6 en el Aeropuerto de Pamplona (1975); 23,0 en la localidad turolense de Calamocha (1993); 25,5 en el Aeropuerto de Zaragoza (2,4 más que el pasado sábado); 22,2 en el Aeropuerto de Huesca (1944) y 27,2 en Tortosa (1920).