Urkullu asegura que Rajoy “no era muy dado a la aplicación del 155”
- El lehendakari asegura que fue Puigdemont quien le pidió que mediara en el conflicto
- Reconoce que el acuerdo para convocar elecciones en Cataluña se frustró por presión de la calle y los independentistas
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El lehendakari vasco, Iñigo Urkullu, dijo este jueves en la novena sesión del juicio del `procés´ que ejerció como mediador en el conflicto catalán a instancias del expresidente catalán Carles Puigdemont y desveló en un momento de la declaración que "Mariano Rajoy no era muy dado a la aplicación del artículo 155" de la Constitución.
En respuesta a preguntas del abogado Francesc Homs, el lehendakari explicó que en un momento dado pidió al presidente Rajoy algún tipo de "garantías" de que no se aplicaría el 155, pero no se las pudo dar, aunque sí admitió que había “una posibilidad" de que no se recurriera a la suspensión de la autonomía si Puigdemont convocaba unas elecciones. En todo caso, señaló, “no hubo una respuesta taxativa por parte del Gobierno español".
Urkullu explicó que la actitud del presidente catalán fue, en todo momento, “receptiva” a sus propuestas y que en Rajoy encontró “en todo momento una actitud de escucha, de atención, aun cuando la respuesta no fuera satisfactoria los días 25 a 27 de octubre”. Explicó, no obstante, que manifestó “una actitud renuente a cualquier paso que pudiera interpretarse como una negociación que traspasara los límites de la Constitución" y que su talante no fue “proactivo para intentar encauzar la situación”.
El máximo responsable del Gobierno vasco insistió en que sus propuestas nunca fueron en la dirección de avalar una declaración unilateral de independencia o de convocar un referéndum que desbordara los límites del ordenamiento jurídico, aunque sí habló de lograr una convocatoria pactada.
Urkullu hizo un detallado relato de su labor de "mediación" en el 'procés'. A diferencia de lo que explicó ayer Rajoy, que no aclaró si se reunió personalmente con el lehendakari, él dio fecha, tiempos y detalles de todas las reuniones y conversaciones que mantuvo con ambas partes.
Según explicó, los contactos comenzaron el 19 junio de 2017, cuando mantuvo una conversación de cuatro horas con Puigdemont, junto al que asistió al 30º aniversario del atentado de Hipercor. En ese encuentro, el president le manifestó la “situación de bloqueo absoluto” de la situación de Cataluña y “me solicitó que yo interviniera para encauzar la situación y reconducirla hacia una solución pactada”.
A continuación, el 21 de septiembre de 2017, un día más tarde de los registros en la Consellería de Economía, mantuvo una conversación telefónica con Rajoy y es partir del 4 de octubre cuando, según Urkullu, "se me solicita que intervenga y lo hacen muchas personas". Desde ese día y hasta el 27 de octubre mantuvo una "prolija relación con todo tipo de responsables políticos, institucionales, sociales".
En relación a los sucesos del 20-S, Urkullo advirtió a Rajoy de que "las cosas no debían seguir de la manera que se estaban conduciendo e hice la observación de que todo se estaba yendo de las manos". Le dije que había que medir mucho los pasos que había que dar para evitar la fractura social", añadió. El presidente del Gobierno le respondió que a partir de ese momento que "haría lo mínimo" y "cuidaría lo máximo" las acutaciones para lograr ese objetivo.
En respuesta a esas conversaciones, Urkullu indicó que encontró en Puigdemont "una actitud completamente receptiva, lo que se trasladó al acuerdo al que se llegó en la madrugada del 25 al 26 de octubre”. Los dos líderes siguieron en contacto los días previos al 27 de octubre de 2017 sobre la declaración unilateral de independencia.
Urkullu relató que “a las 14.00 horas del 26 de octubre, él (Puigdemont) me comunicó, lamentando que las personas que estaban concentradas en la plaza de Sant Jaume se le estaban rebelando y que tenía presión en su grupo parlamentario, no podía continuar con el acuerdo de disolver el Parlamento y convocar elecciones autonómicas, que era lo que yo le recomendaba para evitar la aplicación del 155”.
El acuerdo se había alcanzado la noche del 25 de octubre. El día 26 mantuvieron una nueva conversación apenas una hora antes de que Puigdemont compareciese ante los medios, presuntamente para convocar elecciones, y fue entonces cuando la comunicó la imposibilidad de cumplir el acuerdo.
(SERVIMEDIA)
28 Feb 2019
SGR/ICG/mgr/gja