La ONCE indica en una nota que realiza un importante esfuerzo y compromiso que no sólo garantiza que quienes adquieran sus juegos estén protegidos, sino también que los ingresos para cumplir con la misión de la organización se mantengan de forma sostenible.

El Día Internacional del Juego Responsable se celebra el 17 de febrero desde el año 2008, cuando tuvo lugar la primera edición, organizada por la European Gambling and Betting Association.

El Juego Responsable se traduce en una serie de prácticas para asegurar que los operadores de juego comercialicen una oferta de productos que cumpla con los más altos estándares y garantice la protección de sus clientes ante posibles consecuencias adversas.

Como miembro de la Asociación Mundial de Loterías y de la Asociación Europea de Loterías, la ONCE ha suscrito los principios de Juego Responsable que implican la prevención del juego de menores de edad y de aquellas otras personas que tengan prohibido su acceso al juego, así como la lucha contra el juego excesivo, el fraude y el lavado de dinero.

La política de Juego Responsable de la ONCE hace posible que la organización fomente la investigación para contribuir a la sensibilización social sobre los problemas vinculados al juego excesivo. Además, informa a sus trabajadores sobre los programas de Juego Responsable; y los empleados que tienen contacto directo con el consumidor reciben además formación especializada reforzando elementos clave como la prohibición expresa de venta a menores o a crédito.

La ONCE proporciona a los integrantes de los canales de distribución de sus juegos formación al inicio de su actividad comercial. Antes de iniciar su comercialización, todos los juegos deben ser evaluados y, en el caso de obtener puntuaciones de riesgo elevado, deben modificarse.

En su web comercial y en cualquier canal de juego remoto que pueda habilitarse, la organización establece los elementos limitadores identificados y reconocidos internacionalmente como más eficaces para minimizar los patrones de comportamiento que impliquen riesgos.

Además, la ONCE ha adoptado formalmente un código autorregulador de publicidad y marketing, que asegura que las estrategias comerciales y las campañas publicitarias no fomentan el juego entre los menores de edad ni el juego excesivo, y que tampoco proporcionan a los participantes información engañosa, como falsas impresiones sobre las probabilidades de ganar.

La ONCE ha suscrito un acuerdo marco de colaboración con la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR), mayoritaria referencia asociativa en España de este sector de población, a fin de comprender mejor el impacto que puedan tener los productos de lotería y su publicidad sobre jugadores con problemas asociados al juego desordenado, así como para facilitarles ayuda a distancia.

Además, la ONCE se dirige a los consumidores de sus juegos para informar y sensibilizar sobre aspectos relacionados con el Juego Responsable.