Así lo aseguró en el Pleno del Congreso de los Diputados durante el debate de las enmiendas a la totalidad del proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2019, en el que Montero, tras la defensa del portavoz parlamentario de ERC, Joan Tardà, de su enmienda para rechazar las cuentas públicas, destacó “el error” de ERC al no apoyar los Presupuestos.

“Si la tramitación de los PGE depende de que se hable sobre el derecho de autodeterminación de Cataluña no habrá PGE”, aseguró la titular de Hacienda, quien recordó a Tardà que esa es la postura del Gobierno “desde el primer día” pero que “hay margen en el marco del diálogo” dentro de la Constitución, además de asegurar que el Gobierno garantizará la independencia de la justicia y la separación de poderes.

“No se va a comprender en Cataluña que un partido de izquierdas no apoye la mejora que los PGE permiten en las condiciones de vida de los ciudadanos”, afirmó Montero, quien remarcó que “probablemente no haya habido unos PGE mejores para Cataluña en los últimos años”, al contemplar una previsión de más de 2.000 millones de inversión para Cataluña, además de un aumento de las transferencias, mejoras de los servicios públicos y medidas como la supresión del copago farmacéutico, el incremento de becas, la ampliación de los permisos de paternidad, o el aumento de los recursos para dependencia.

Así, espetó al líder de ERC que, “le guste o no le guste, van a votar junto a las derechas” de PP y Ciudadanos, y que a veces piensa que las formaciones independentistas, así como las de derechas, tienen intereses electorales en utilizar la confrontación, pero que “este Gobierno tiene un proyecto para España en el que todos nos sintamos orgullosos de formar parte de él”.

En este sentido, la ministra resaltó que el Gobierno desea “una España más fuerte con Cataluña dentro” y abierto “a mayores dosis de autogobierno” respetando la Constitución, pero denunció que las formaciones independentistas “no han querido participar de las mesas institucionales de diálogo que existían en Cataluña ni en esta Cámara”.

Asimismo, subrayó “la valentía” del Ejecutivo socialista y sus intentos de mejorar la relación con la Generalitat, nombrando como ejemplos la “veintena de encuentros y el establecimiento de cauces de diálogo”, así como las reuniones mantenidas por Pedro Sánchez con el presidente de la Generalitat, o las reuniones mantenidas por la comisión bilateral entre el Estado y la Generalitat y los acuerdos alcanzados para respetar las decisiones judiciales sobre el déficit inversor en Cataluña o para resolver el problema de la financiación de los Mossos.

Por último, Montero aseguró que “la historia nos demuestra que España ha avanzado cuando reconoce su pluralidad” y que el conflicto catalán requiere de “paciencia”, pero recordó a Tardà que “en Cataluña no existe una mayoría social a favor de la independencia ni tampoco a favor de la recentralización, y menos para retirar la autonomía, pero sí una mayoría social y transversal que quiere profundizar en el autogobierno”, por lo que insistió en que “hay margen para dialogar y debatir” y pidió a ERC que “reflexionen y apoyen unos PGE que son buenos para Cataluña y España”.