Así lo recoge el informe de retribuciones remitido por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), consultado por Servimedia, en el que se refleja que el consejero con la mayor retribución fue Ricardo Currás, consejero delegado cesado en agosto, con un total de 2,56 millones de euros, de los que 1,64 millones corresponden a la indemnización recibida por su destitución. Además, Currás también ha de recibir, en contraprestación por la obligación de no competencia post-contractual, 606.600 euros como compensación equivalente a una anualidad de la retribución fija anual, de los que hasta el momento ha recibido 101.100 euros, correspondientes a dos mensualidades.

Sobre este punto, DIA señaló este viernes que está analizando la activación de las cláusulas ‘clawback’ sobre las retribuciones abonadas a los consejeros ejecutivos cesados durante 2018, por lo que podrían exigir a Currás la devolución de parte de su retribución recibida en 2018 y, hasta que se tome una decisión al respecto, se ha suspendido el abono de la contraprestación económica por la obligación de no competencia post-contractual.

Por otro lado, el sucesor de Currás como consejero delegado, Antonio Coto, quien a su vez fue cesado en diciembre, tras solo cuatro meses en el cargo, percibió una retribución de 261.000 euros, aunque no recibió indemnización por su destitución. En cualquier caso, la compañía también podría activar la cláusula ‘clawback’ sobre la retribución de Coto.

El tercer consejero con mayor retribución fue Borja de la Cierva, sucesor de Coto como consejero delegado, con 125.000 euros, seguido de Mariano Martín (124.00), Ana María Llopis (119.000) y Antonio Urcelay (116.000).

El Grupo DIA registró en 2018 unas pérdidas de 352,5 millones de euros, en contraste con el beneficio de 101,1 millones obtenido en 2017, por lo que el actual consejero delegado, Borja de la Cierva, afirmó este viernes que 2018 fue “un año turbulento para DIA, probablemente el más difícil desde la fundación de la compañía hace más de 40 años”.

Además, junto a la publicación este viernes de los resultados de 2018, la compañía presentó su nuevo Plan de Negocio, en el que incluye la apertura de un proceso de despido colectivo que afectará en España a un máximo de 2.100 empleados de DIA y su filial Twins. Dicho proceso, apuntó la compañía, “tiene por objetivo asegurar la sostenibilidad futura de la compañía y reforzar la posición global del grupo”.