La gran banca clausuró 714 sucursales en España y prescindió de 2.300 empleados el año pasado

MADRID
SERVIMEDIA

Los cinco mayores bancos españoles (Santander, BBVA, Caixabank, Bankia y Sabadell) volvieron a ajustar su estructura en España durante el pasado ejercicio con el cerrojazo de 714 sucursales y la amortización de 2.299 puestos de trabajo, tal y como detallan en los informes financieros recogidos por Servimedia.

El tijeretazo supone prescindir de un 4,14% de las oficinas, cuyo censo pasó de 16.514 a 17.228 en el ejercicio. En plantilla la reducción se limitó al 1,68%, pero aún así el personal en nómina descendió de 136.142 trabajadores a 133.843.

Un proceso que se intensificará este año ya, que BBVA ha anunciado la clausura de 179 locales durante el ejercicio; Caixabank ha propuesto a sindicados la salida de 2.157 trabajadores y echar la persianilla a casi 800 locales dentro de una nueva estrategia de modelo de sucursales; y el Santander iniciará un proceso similar fruto de la integración del Popular.

El adelgazamiento de red física, con una apuesta por oficinas de mayor dimensión con horarios de atención también por las tardes y mejor abastecidas de personal para que se vuelquen en comercializar productos y asesorar al cliente, está detrás de la mayoría de estrategias. La banca justifica la revolución del modelo en los cambios de hábitos de clientes que prefieren cada día más una atención digital, evitándose los antiguos paseos a la sucursal, algo que les ayuda además a economizar costes y hacer la operativa más eficiente.

Caixabank, que es la que tiene planes más agresivos de ajustes en la red, se mantuvo el pasado año como la de mayor capilaridad, con 5.103 locales frente a los 5.379 con los que había iniciado el ejercicio, un 5,13% menos. Su plantilla aumentó, en contraste, un 1,26% desde 36.972 empleados a 37.440.

El mayor adelgazamiento de red lo ejecutó Bankia, con un recorte del 5,15% en las oficinas (pasaron de 2.428 a 2.298) y del 10,32% en el número de empleados (se redujo desde 17.757 a 15.924 personas) fruto de la acomodación de estructuras después de la integración de BMN y que finalizó el pasado ejercicio.

La capacidad más estable fue la del Sabadell, cuyo censo de locales disminuyó un 0,78%, desde 1.922 a 1.907; e incrementó un 1,53% el cómputo de empleados hasta 17.828, desde los 15.558 -este censo es del grupo sin incluir la filial británica-.

Por su parte, la red del Santander en España, que ya integra al Popular, pasó de 4.485 a 4.366 oficinas (-2,65%) y la plantilla de 33.271 a 32.313 (-2,87%) con el anticipo de algunas clausuras puntuales por claros solapamientos y amortizaciones de puestos de trabajo.

En BBVA, que ya concluyó los ajustes derivados de las fusiones hace años de CaixaCatalunya Banc y Unnim, la acomodación de su estructura la vincula a la digitalización y el uso de los canales remotos por parte de sus clientes. Cerró el año con 2.840 oficinas o un 5,93% menos (tenía 3.019 al inicio del año) y del 0,81% en número de empleados, cuyo número pasó de 30.584 a 30.338.

(SERVIMEDIA)
03 Feb 2019
ECR/pai