En la inauguración de la Asamblea Plenaria de la CEE, lamentó también la erosión de la familia y del matrimonio actual, y lo atribuyó a una ley que hoy en día “no protege” a la institución.

“El moderno hombre adulto se ha sentido autorizado para disponer de su vida y de la de los demás”, y así ha llegado a considerar derecho lo que es “un homicidio”, criticó.

Rouco hizo constantes referencias a los discursos que el Papa Benedicto XVI realizó durante su visita a Santiago de Compostela y Barcelona, y al igual que el pontífice reivindicó el papel de España en la reevangelización de Europa.

Asimismo, afirmó que la Iglesia es víctima de “manipulaciones e incomprensiones” que llegan desde fuera, y calificó de “muy justas” las declaraciones que Benedicto XVI dedicó a la labor evangelizadora de España.

En su opinión, el vigor del Catolicismo en el país tiene “su otra cara” en “un fuerte laicismo”, y fue a esta contradicción a la que se refirió el Papa al hablar de los años 30, “sin caer en paralelismos anacrónicos”, agregó Rouco.

El cardenal también lamentó el secularismo de las sociedades occidentales y la dicotomía entre fe y razón.