En un comunicado, el comité de los trabajadores denunció que a partir de este viernes, la emisora de RNE en catalán "entrará en la etapa más oscura de sus ya casi 33 años de historia", con una programación recortada y con unos contenidos básicamente musicales, alejados de la radio generalista y con "personalidad" que en su día fue.

"Esta situación, fruto en parte de la reestructuración de RTVE, ha contado desde el primer momento con la complicidad de la dirección, con Montse Meliá a la cabeza", señaló la nota. "A pesar de las advertencias, denuncias y oposición constante de sus profesionales, la escasez de medios ha hecho mella y la falta de un proyecto realista ha acabado por contaminarlo todo. A los trabajadores de RNE Barcelona/Radio 4 nos hubiera encantado que nos liderará una dirección valiente, luchadora y decidida que se esforzara por buscar una salida digna y que hubiera defendido los puestos de trabajo en calidad y cantidad.

Lejos de esa actitud, el comité de empresa afirma que los trabajadores "únicamente hemos constatado una simple aceptación y ejecución de las órdenes dadas desde Madrid con el único objetivo de mantener el cargo, redondeándolo con una programación que por ser muy barata ha sido aceptada. Nosotros, y todos aquellos que nos han precedido en la lucha, no pretendíamos salvar Radio 4 para acabar asumiendo una programación de seis horas al día".

Los representantes de los trabajadores subrayan que, llegados a este punto, no pueden "permitir ni un minuto más el desmantelamiento de esta emisora". "Por este motivo creemos urgente hacer pública la petición de dimisión de Montse Melià y su equipo, responsables directos de nuestra defunción", concluyó la nota.