Así lo puso de manifiesto en el transcurso de una entrevista concedida a Servimedia en la que reconoció que la universidad pública “debe ser sensible” a las demandas de los estudiantes, “más allá" de que dichos precios "los establece el Ministerio, aunque este va en la misma senda”. “Creo que nuestra universidad mantuvo una política muy restrictiva en cuanto a subida de precios y seguiremos en esa línea”, aseveró.

Por lo que respecta a su proyecto, “apuesta por un salto cualitativo, innovador y vanguardista hacia la modernidad”, anunció, convencido de que la UNED “debe reivindicar el lugar que ocupa en la sociedad y también decidir hacia dónde quiere ir” y, en este punto, tiene “clara” la necesidad de alinear la “política” que rige esta institución académica con las que marcan las agendas internacionales en materia de educación e investigación.

Integrado por más de 130 medidas, su programa es resultado de un “diagnóstico bastante exacto y reflexivo de los problemas y desafíos” que, a su entender, afronta la UNED y “recoge los objetivos así como las soluciones para dar ese salto cualitativo hacia el futuro con realidad, realismo, prudencia y manteniendo nuestras señas de identidad”, agregó.

MATRICULACIONES

Entre sus principales “preocupaciones” está recuperar el número de matriculaciones tras el descenso de entre un cinco y un seis por ciento que se produjo en época de crisis, a pesar de que en el caso de la oferta de másteres “existe una demanda que no se puede atender”.

A este respecto, Mairal cuenta con un “plan de lucha contra el abandono” con propuestas como la designación de la figura del tutor-mentor, que acompañe al alumno desde el primer curso, o la del compañero-mentor, “que les aconseje” así como un curso cero de adaptación y otra “serie de medidas para fidelizar a los estudiantes”.

Otra de las “cuestiones pendientes” es el rejuvenecimiento de la plantilla, ya que prácticamente un tercio de la población universitaria tiene entre 55 y 70 años y la media de edad de los ayudantes doctores supera los 40 años y, en este sentido, apostó por crear una “cantera” que permita asegurar el relevo generacional.

Tras subrayar que la UNED cuenta con unos 200.000 alumnos, 1.400 profesores y 6.000 tutores, estimó “absolutamente injusto” situar “al mismo nivel el trabajo de tantos profesionales y el sacrificio de tantos estudiantes que luchan por conseguir un título con casos muy aislados que deben ser condenados y rechazados sin ningún paliativo”.

Defendió que su proyecto "necesita el apoyo, el esfuerzo, el talento y las capacidades de todas las personas que componen la UNED” y adelantó que, si resulta elegido, incorporará “todas aquellas ideas que apuesten por el futuro y la modernización de la universidad”.

“Con todo el respeto, siento y creo que es mi momento”, aseguró el actual rector en funciones en relación a sus dos adversarias, la catedrática de Filología Carmen Victoria Marrero y la de Psicología María Encarnación Sarriá.

Mairal encara este proceso electoral “con mucho entusiasmo e ilusión”, aunque “desde la humildad, el respeto y la prudencia con las otras dos adversarias” y, tal y como reza el eslogan de su campaña, aboga por que la UNED siga avanzando “con ilusión, visión, confianza, prestigio, solidez, ética, cercanía", pero, por encima de todo, "avanzando con todos". Si gana en la primera vuelta, su proclamación definitiva sería el 19 de noviembre.