Lo dijo en la sesión de control al Gobierno en el Congreso a una pregunta del diputado del PDECat Jordi Xuclà, sobre si considera que entre las funciones del embajador de España en Francia, Fernando Carderera, se encuentra la emisión de juicios de valor sobre las relaciones institucionales del alcalde de Perpignan, Jean-Marc Pujol.

Xuclà se refería a la carta que Calderera remitió a Pujol en la que lamenta que éste portase un lazo amarillo cuando recibió al presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, el pasado día 31 de agosto.

El jefe de la diplomacia española dejó claro que la actitud del embajador de España fue “correcta” y retó a Xuclà a mostrar pruebas que evidencien que aquel puso trabas o emitiera juicios de valor contra el encuentro entre Torra y Pujol.

No obstante, aseveró que el embajador actuó adecuadamente cuando comprobó que “una autoridad pública de un país extranjero recibe oficialmente en su despacho a una personalidad española con un símbolo que defiende que hay presos políticos en España y que la Justicia española no es independiente y está sometida al Gobierno”.

Refutó que el Ejecutivo dicte órdenes a los jueces sobre el ‘procés’ y destacó que el secretario general del Consejo de Europa, Thorbjørn Jagland, mostró el “pleno apoyo” del organismo que dirige al marco constitucional español y subrayó su “plena confianza” en la independencia del poder judicial de España

Por ello, reiteró que “si una autoridad pública de un país extranjero recibe a otra autoridad pública española luciendo un símbolo que habla de una descalificación absoluta del sistema judicial español, el embajador protesta”.

Por su parte, Xuclà consideró “gravísima” la actitud del embajador en Francia y rechazó que un “electo francés” tenga que dar explicaciones ante otro país sobre sus “actos y acciones”.