Así se pronunció Borrell durante su comparecencia en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados, en la que tuvo que defenderse de las críticas que ha recibido tras afirmar en la BBC que "personalmente" preferiría que los políticos independentistas encarcelados estuvieran en “libertad condicional”, ya que existen “otras maneras de asegurar que no huyen”.

El ministro desdeñó las críticas del portavoz del PP en la comisión, José Ramón García Hernández, quien llegó a acusarle de aspirar a llevar prendido en su indumentaria un lazo amarillo. Lo hizo destacando que Exteriores decidió presentar recurso contencioso-administrativo contra el decreto 126/2018 de la Generalitat de Cataluña por el que se restablecen sus delegaciones en Reino Unido e Irlanda, Alemania, EEUU, Italia, Suiza y Francia por “no haberse cumplido las condiciones que establece la legislación vigente para la creación de delegaciones de las comunidades autónomas en el exterior”.

Borrell defendió que el desafío independentista le "afecta" y le "interpela", porque la garantía de la integridad territorial del Estado es un asunto que compete especialmente a un ministro de Asuntos Exteriores.

Subrayó que España no responde al estereotipo que los independentistas han creado de ella, acusando al país de ser "represor" y neofranquista". Prueba de ello, adujo Borrell, es que el secretario general del Consejo de Europa, Thorbjørn Jagland, ha mostrado el “pleno apoyo” del organismo que dirige al marco constitucional español y su “plena confianza” en la independencia del poder judicial de España.

Al mismo tiempo, enfatizó que desde que se produjo el cambio de gobierno "poco a poco" se está "recuperando terreno" ante el mensaje de los independentistas en el exterior. "No es tan dominante", comentó, si bien advirtió de que esa imagen internacional todavía "no es todo lo buena que debería ser".

Respecto de sus palabras sobre los políticos independentistas encarcelados apuntó que en esa entrevista arguyó que en España existe la separación de poderes y la independencia judicial, lo que le permitió observar que quizá el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena no hubiera tomado una decisión tan severa como la prisión incondicional si el expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont "no hubiera dejado dejado colgados de la brocha (a los políticos presos) huyendo".

Por su parte, Carlos Salvador (UPN) acusó a Borrell de haber proferido unas afirmaciones en la entrevista en la BBC que suponen una "contradicción" que genera "cierta debilidad", mientras que Fernando Maura (Cs) le reprochó que su actitud no es la propia de un miembro de un "gobierno responsable".