Según explicó Oxfam, la alarma se ha activado en el marco de las primeras conversaciones que se celebran en Ginebra con el fin de impulsar la paz entre las fuerzas apoyadas por Arabia Saudí y los rebeldes hutís.

Según los informes recogidos por el departamento de Naciones Unidas encargado del seguimiento del impacto en la población civil, más de 450 civiles perdieron la vida en los primeros nueve días de agosto, incluidos 131 menores. A fecha del 31 de agosto, un total de 981 personas civiles habrían resultado heridas o muertas, incluidos 300 niños y niñas.

Sin embargo, esta organización opina que estas cifras no representan el número real de víctimas civiles. En un comunicado aseguró que “las armas españolas podrían estar alimentando estas masacres. España es el cuarto exportador de armas a Arabia Saudí y solo en 2017 vendió 270 millones de euros”.

A este respecto, el Gobierno español anunció esta semana que revisará todas estas exportaciones. El director de Oxfam Intermón, José María Vera, declaró en este sentido que “nos congratula esta decisión recién tomada por la Secretaria de Comercio, aun así, pedimos que cese cualquier transferencia hasta que no se haya finalizado esta revisión. Si España no quiere ser cómplice de crímenes de guerra debe parar toda venta de armas a Arabia Saudí y al resto de los miembros de la coalición”.

YEMEN, ZONA DE FUEGO

En estos momentos, Yemen es una 'zona de fuego' en la que la población arriesga sus vidas a diario, ya sea al celebrar una boda o enterrar a sus seres queridos como yendo al mercado. El sufrimiento de la población de Yemen “es una vergüenza para nuestra humanidad y un fracaso de los países con poder a la hora de defender a la población”, según destacó esta organización.

Por ello, añadió que poner fin a la matanza de personas civiles tiene que ser una prioridad para todas las partes y comunidades de Yemen. Las conversaciones que están teniendo lugar hoy en Ginebra “les podrán ofrecer la oportunidad de establecer un límite claro y de detener los ataques perpetrados contra la población civil”.

Según datos de Naciones Unidas, entre el 26 de marzo de 2015 y el 9 de agosto de 2018 se registraron un total de 17.062 víctimas civiles, de las cuales 10.471 se debieron a ataques aéreos perpetrados por la coalición liderada por Arabia Saudí, según recordó esta ONG.

Hutís y otros grupos armados continúan oprimiendo Taiz y otras zonas en las que las luchas callejeras y el uso de minas terrestres siguen provocando nuevas víctimas civiles. La falta de acceso hace que la población se vea privada de asistencia humanitaria.