La presentadora del informativo gallego cometió una “falta muy grave”, según la versión de la empresa pública gallega, por la “utilización de medios de la casa para fines particulares”, en concreto porque habría usado los servicios de maquillaje y peluquería antes de una gala benéfica contra el cáncer que iba a conducir.

Moyano indicó que siguió el protocolo previsto en la Televisión Gallega para estos casos, con aviso previo a sus superiores, y denunció que esta sanción responde a su actitud crítica respecto a la supuesta manipulación en la televisión autonómica.

La Asociación de Periodistas de Santiago calificó esta medida como “desproporcionada y vengativa” por parte de la TVG, y “claramente ligada a que Tati Moyano se significó por participar activamente contra la manipulación informativa en la TVG y por su apoyo a la campaña de los viernes negros tanto en RTVE como en la CRTVG”.

La FAPE anunció este viernes en una nota que otorga su “apoyo” y acepta la petición de amparo de la periodista, poniendo “todos sus medios y solidaridad a su alcance para su defensa ante la amenaza de despido”.