Así lo explicó Ábalos en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, donde fue preguntado por este nuevo conflicto laboral en los aeropuertos españoles. Tras aclarar que se trata de una movilización que afecta a empresas privadas, mostró su preocupación en la medida de su posible efecto en un servicio público.

De hecho, destacó que al llegar al Ministerio se encontró con la amenaza de huelga de los controladores aéreos de Enaire que terminó tras alcanzarse un preacuerdo, que ha sido ya ratificado por los trabajadores. “Esa amenaza la hemos disipado", se felicitó.

Esta posible convocatoria de huelga, que afectaría a todos los aeropuertos españoles, depende de una futura reunión en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) entre los sindicatos CCOO, UGT y USO y la patronal del sector.