Si el presidente argumentó su cambio de Gobierno por el deseo de tener quince portavoces, en cada uno de los ministerios, Iglesias añadió que tras la reunión del Comité Federal del PSOE de hoy el partido aporta otros 400 portavoces en todo el territorio para explicar y defender las medidas del Ejecutivo.

Iglesias reconoció su satisfacción por la confianza que el presidente ha depositado en él al proponerle, y el Comité Federal al ratificarle, para una tarea que preve “un poquito complicada” y que en los próximos meses le tendrá a caballo entre la Presidencia de Aragón y la sede federal del PSOE.

Algunos creían “que el partido había terminado”, aseguró, pero el Gobierno y el PSOE han demostrado que inician “la remontada” con un Ejecutivo reforzado y un partido “unido, fuerte, con ilusión en el futuro, integrado, y donde todo el que tenga valor que aportar será tenido en cuenta”, porque ese es el encargo de Rodríguez Zapatero.

Iglesias quiere que los ministros y demás miembros del Gobierno sientan la sede del partido como “su casa” y precisó que Acción Electoral seguirá en manos del vicesecretario general, José Blanco, con el que está seguro de que se entenderá “muy bien”.