Según informó el Ministerio de Fomento en una nota, ambas partes se han comprometido a explorar todas las posibilidades para alcanzar un acuerdo, sin escatimar esfuerzos, conscientes del indeseable impacto socioeconómico que tendría un conflicto laboral en el Centro de Control de Enaire en Barcelona, en plena temporada alta, para el sector turístico y para el transporte aéreo en general.

Desde Fomento señalaron que paros en verano, como el que analizan llevar a cabo los controladores de Barcelona, afectarían a pasajeros, compañías aéreas, gestores aeroportuarios, “y, por supuesto, a la imagen de España”.

A partir de mañana, jueves, representantes de Enaire, entidad que preside también Pedro Saura, y USCA volverán a reunirse para abordar todos los aspectos que forman parte de la negociación: plantilla, mejora de las condiciones laborales, medidas de conciliación, desarrollo profesional, formación o modernización de los sistemas tecnológicos.

Según el Ministerio, Cataluña es la comunidad autónoma donde Enaire va a reforzar más la plantilla este verano, con 58 controladores más que el pasado en términos netos, ya que se pasa de 392 controladores a 1 de agosto de 2017 a 450 controladores en la misma fecha de este año.