Según informó este viernes el Icomen, este documento ha sido refrendado por la Junta Directiva de esta institución y en él se recuerda a los médicos de forma textual que “deben emplear en su trabajo no sólo procedimientos sino también y en su caso prescripciones de fármacos cuya eficacia se haya demostrado científicamente, de manera que se consideran contrarias a la ética aquéllas prácticas carentes de base científica, los procedimientos ilusorios o los insuficientemente probados que se propongan como eficaces”.

En esta misma línea, el documento hace hincapié en que “la principal lealtad del médico está con el paciente, cuya salud debe anteponerse a cualquier otra conveniencia”.

El presidente del Icomen, el doctor Miguel Ángel Sánchez Chillón, presentó este documento en la Asamblea de Sociedades Científicas con el objetivo de advertir a médicos y ciudadanos de la importancia del uso de fármacos y procedimientos basados en la evidencia científica existente.