En el marco de la “Operación Pangea III”, coordinada por Interpol, se han cerrado 290 páginas web y se han decomisado más de un millón de comprimidos falsos de medicamentos y complementos dietéticos. Además, se han inspeccionado más de 267.000 envíos de paquetería.

En el dispositivo han participado 45 países, cuyas investigaciones han permitido descubrir en Internet 694 sitios web dedicados a estas actividades ilícitas, de los que 290 han sido cerrados.

Esta operación es la acción más extensa sobre Internet de este tipo coordinada por Interpol y en ella han participado cuerpos policiales, aduanas y reguladores nacionales de medicamentos de los cinco continentes.

Los esfuerzos se centraron prioritariamente en los tres componentes principales de este comercio ilícito internacional por Internet: el proveedor de servicio de Internet, los sistemas de pago, y los servicios de mensajería o entrega de productos.

ELEVADOS INGRESOS

La participación española, llevada a cabo por la Sección de Consumo, Medio Ambiente y Dopaje de la Comisaría General de Policía Judicial, ha consistido en la investigación sobre nueve farmacias "on-line", que desarrollaban su actividad en España.

Las pesquisas permitieron cercenar el acceso de estos comercios virtuales a los distintos medios de pago electrónico (tarjetas bancarias, servicios de pago, etc.), por lo que su actividad económica y mercantil ha desaparecido.

En el total de la acción global han sido detenidas 76 personas, cerradas 290 páginas web, inspeccionados más de 267.000 envíos de paquetería y requisadas sustancias por un valor estimado en más de 2,5 millones de dólares.

En relación a la compra y uso de medicamentos falsos e ilegales, la Policía Nacional recordó a los ciudadanos los riesgos para la salud que pueden acarrear esas actividades. Las consecuencias de estos medicamentos falsificados varían desde no aportar ningún beneficio médico hasta resultar altamente peligrosos.