Según informó la compañía este martes, los ingresos por servicios alcanzaron los 4.587 millones de euros, un 2,3% más. El crecimiento de los ingresos en el conjunto del año se debió, según explicó la propia compañía, “al aumento de la base de clientes fijos y convergentes, así como al lanzamiento de los nuevos planes de precios al principio del año fiscal”. Además, Vodafone señaló que dicho crecimiento “se vio ralentizado en el tercer trimestre por la fuerte actividad promocional”.

En cuanto al resultado bruto de explotación, éste alcanzó los 1.420 millones de euros, un 5% más, debido “al crecimiento de los ingresos por servicio y a la reducción de los costes comerciales operativos, efectos que compensaron el aumento de los costes mayoristas de acceso a la red de fibra, así como los de contenidos y ‘roaming’”.

Por otra parte, las altas de contrato móvil de la compañía ascendieron a 164.000, de las que 40.000 fueron en el último trimestre]. Vodafone España cerró así el ejercicio con 14,1 millones de clientes móviles, de los que 11,5 millones son de contrato.

Respecto al número de clientes de Vodafone con dispositivo y tarifa 4G, este experimentó un crecimiento de más de 1,3 millones a lo largo del año fiscal, hasta los 8,8 millones.

Por último, en los últimos tres meses la base de clientes de fibra de Vodafone España creció en 52.000, para alcanzar un aumento total de 419.000 en el conjunto del año. Así, el número de clientes de fibra totales de la compañía ascendía a 2,7 millones a 31 de marzo, un 18% más que doce meses antes.