Según indicó en una nota, encontrar películas subtituladas en los cines españoles “es, a veces, misión imposible, y salvo contadas experiencias, las salas no disponen de recursos de apoyo a la audición como sistemas de bucle magnético, que permiten a los espectadores con sordera seguir la proyección a través de sus prótesis auditivas”.

Criticó que la actual Ley del Cine y su normativa de desarrollo, encargada de regular aspectos como la concesión de ayudas a la producción, exhibición y distribución en España, “siguen ignorando a las personas sordas, dado que no contemplan como requisito indispensable para conceder dichas ayudas que películas, productos audiovisuales y las salas de proyección sean accesibles”.

Por este motivo, Fiapas exigió a los organismos responsables de la concesión de tales subvenciones y a la propia industria del cine “mayor implicación para que en toda producción cinematográfica y audiovisual se asuma la accesibilidad desde el origen de cada producto”.