Así se desprende del avance de la balanza de pagos correspondiente a enero y febrero publicado por el Banco de España este lunes. Dentro de la cuenta corriente, el saldo de bienes y servicios fue positivo y se situó en 1.200 millones, por encima de los 1.100 millones del mismo periodo de 2017.

De estos bienes y servicios, turismo y viajes se mantuvo invariable, con un superávit de 4.200 millones.

Las rentas primaria y secundaria redujeron su déficit desde los 2.400 millones hasta los 2.100 millones. Por su parte, la cuenta de capital amplió su saldo positivo en 400 millones y alcanzó los 600 millones. En suma, la cuenta corriente y la de capital obtuvieron un saldo deficitario de 200 millones, inferior al registro del mismo periodo del año anterior (-1.000 millones).

En términos acumulados de 12 meses, la economía española registró en febrero de 2018 una capacidad de financiación por importe de 25.500 millones, comparados con los 24.800 millones acumulados en el conjunto de 2017.

Mientras, el saldo neto de la cuenta financiera excluyendo el Banco de España se situó en 23.700 millones en los dos primeros meses del año, siendo las mayores aportaciones a este saldo las de la inversión de cartera, con 15.000 millones y la otra inversión, con 5.200 millones. El saldo de la cuenta financiera del Banco de España frente al exterior fue negativo y se situó en 22.000 millones.

Solo en el mes de febrero, la cuenta corriente arrojó un déficit de 500 millones, inferior a los 900 millones de febrero de 2017. Bienes y servicios ampliaron su superávit hasta los 1.200 millones, y turismo y viajes se mantuvieron en los 1.900 millones.

Por su parte, la cuenta de capital en febrero sumó 100 millones más, hasta un total de 200 millones. En suma, la cuenta corriente y la de capital registraron un descenso de su déficit de 500 millones, hasta situarse en 300 millones.