Según informó este martes la Plataforma, también se solicitará que se fomente la investigación con células madres de médula ósea en base a los protocolos aplicados con éxito en clínicas ubicadas fuera de nuestras fronteras. Además, esta organización se reunirá con distintos grupos parlamentarios para pedir la puesta en marcha de ensayos clínicos.

Según explicó esta Plataforma, en España, “los hospitales públicos utilizan terapias con células madres para esclerosis múltiple, cardiopatía dilatada, diabetes tipo 1, regeneración de cartílago y esclerosis lateral amiotrófica (ELA). Dada la elevada formación médica de nuestro país, los afectados opinan que si se gestiona bien la investigación clínica, en pocos años los tratamientos podrían extenderse a otro tipo de patologías como parálisis cerebral, epilepsia o autismo”.

Esta asociación recordó, además, que “los tratamientos que se realizan en España son todos con células madres adultas. No se utilizan células embrionarias ni tampoco se usan las llamadas iPS o células inducidas de otro tipo, una tecnología que sí se está desarrollando en países como Estados Unidos o Japón”.

Las células madres adultas utilizadas para tratamientos médicos son las de tipo mesenquimáticas y hematopoyético. Las primeras son las que crean el esqueleto humano y también lo regeneran y las segundas son las encargadas de regenerar la sangre y el sistema inmunitario.

De hecho, esta Plataforma subrayó que en pacientes con parálisis cerebral, la terapia con estas células reduce la espasticidad, mejora la función motora, hay mayor coordinación de movimientos y estabilidad, mejora la capacidad de comunicación y el lenguaje e, incluso, en pacientes con epilepsia, se reducen las crisis.

“En pacientes con autismo se mejora su capacidad de concentración, comunicación y lenguaje, disminuye la hiperactividad y agresividad, mejora su interacción social y la relación afectiva en su entorno. La mayoría de los pacientes son tratados por punción lumbar, donde las células madres se inyectan en el líquido cefalorraquídeo que las transporta por el canal espinal hasta el cerebro”.