En declaraciones en Málaga, donde acudió a presentar la Ciudad de Madrid Film Office, Carmena admitió sobre el acuerdo con el Ministerio de Fomento, Adif y la unión de empresas Distrito Castellana Norte que “ya lo estábamos esperando”, y se jactó de que la posición del Ayuntamiento ha sido fundamental” en el desbloqueo de un asunto que llevaba “25 años atascado y nos hemos empeñado en resolverlo”.

La alcaldesa reivindicó que se ha logrado “lo que el Ayuntamiento quería: un proyecto sostenible, absolutamente social, el que necesita Madrid para el norte”, y que “va a permitir que tengamos la estación que necesitamos”. Además, confesó que cuando ha pasado por la estación de Chamartín ha sentido que “da un poco de vergüenza la (estación) que teníamos”.

Carmena añadió que llevar a término la operación es muy importante porque en el norte de Madrid hay “zonas que estaban nesitando que se cerrara esa herida”: ahora, al sur de la M-30 habrá un centro de oficinas donde sugirió que se podría situar la Ciudad de la Justicia, muy reclamada por el gremio judicial, y al norte viviendas de las que el 20% serán protegidas para dar alternativas al incremento de los alquileres.