Así se pronunció Cantera, en declaraciones a Servimedia, después de la polémica generada por esta decisión de Defensa, que ha sido justificada por el departamento que dirige María Dolores de Cospedal como “una tradición secular de los ejércitos” que “no entra en contradicción con el carácter aconfesional del Estado español”.

Cantera dejó claro que los socialistas “no tienen ningún problema” con que los creyentes “profesen sus ritos”. “En eso, respeto absoluto”, sentenció.

A pesar de ello, criticó que las Fuerzas Armadas se muestren sensibles con una determinada confesión religiosa porque representan al “conjunto del Estado” y a “toda la ciudadanía”, con independencia de sus creencias.

Subrayó que la Constitución Española garantiza en su artículo 16 la aconfesionalidad del Estado y que un real decreto aprobado en el año 2010 establece con claridad aquellos casos en los que la bandera española ha de ondear a media asta.

Criticó que la decisión del Ministerio de Defensa supone una “falta de respeto” para aquellos militares que profesan la fe musulmana, a quienes se obliga durante la Semana Santa a “entrar en una base en la que se rinde honores a un dios que no es el suyo”.

“El Ejército es aconfesional, porque representa a un Estado aconfesional. El Ejército es apolítico y aconfesional, porque representa a todos los ciudadanos”, sentenció.

Insistió en que la bandera a media asta significa “primacía” y “prevalencia” de una religión sobre otra y comentó que si el PSOE vuelve a gobernar “hará cumplir la ley”, sin perjuicio del “respeto absoluto a todas las religiones”.